¡Psché! para su edad es mona todavía, pero para andar en "déshabillé", ( ¡yupiiii! ) sobre todo en público, ya está un poco talludita. Lo que no acabo de entender son las razones por las cuales, para llamar la atención en este país, hay que emporretarse. Si son bomberos, azafatas o mecánicos, para "salir" en un calendario birrioso, hay que ponerse en pelotita picada o como decía mi padre "en cueros vivos". Otros se curten al aire en masa lo mismo en una calle que en una estación de metro y ahora parece que "la cosa" ha llegado a los políticos. ¿Por qué no saldrán argumentando razonada y objetivamente sobre aquello que buscan o critican, tan difícil es eso?