Su apoyo decidido, hasta el extremo de llegar a imponérselos a su pueblo, de la peor colección de planes mundialistas antinatalistas, a la par de la entrega de todos los recursos naturales del país a los buitres de las multinacionales capitalistas que siempre han codiciado las riquezas sudafricanas, hace que no sea nada de extrañar la inmensa batería de loas magnificas con las que el NOM se ha dedicado a ensalzar la memoria de este personaje tan siniestro.
La noticia aparecida en los medios, allá por el año 2009, según la cual las Naciones Unidas declararon el día 18 de julio como "Día Internacional de Nelson Mandela" y la casi total unanimidad con la que esta resolución fué adoptada, muestran a las claras de qué forma Nelson Mandela es uno de sus personajes más paradigmáticos del NOM. Por esa razón ha sido y será a partir de ahora, siempre tan ensalzado un personaje como éste. Un asesino que ha participado con peculiar ahínco en llevar a cabo, durante su estancia en las instituciones suraficanas, toda una suerte maldita de iniciativas de re-ingeniería social, todas ellas anticristianas.
Una unanimidad que muestra el dominio del Nuevo Orden Mundial - ReL
¿Qué podíamos esperar de un hombre que asesinaba a los suyos colgándoles un neumático ardiendo sobre el cuello, para quemarlos vivos a modo de linchamiento de tintes satánicos?. Este hombre y su señora esposa fueron unos vulgares criminales. Por eso, tras su llegada al gobierno, comenzaron también a asesinar niños no nacidos y a vender las riquezas de su nación a intereses espúreos extranjeros (...en eso ya no se diferencia tantísimo de Rajoy, Aznar, Felipe González o de Zapatero. Quizás ellos también debieran reclamarle a la ONU que señalen un día para honrar su apestosa memoria...).
Ignoro si Mandela se habrá arrepentido o no de sus crímenes, así como también ignoro si Dios lo habrá perdonado, pero es que no es éste el tema que estábamos hablando en este hilo. El discernimiento que hacíamos de su trayectoria política es absolutamente mundano, como mundana ha sido también su vida pública. La vida pública de un vulgar asesino.
¡¡Descansen en paz sus víctimas!!, y que Dios las tenga en Su Gloria.
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