¡¡¡¡Deus lo volt!!!!
"El vivir que es perdurable
no se gana con estados
mundanales,
ni con vida deleitable
en que moran los pecados
infernales;
mas los buenos religiosos
gánanlo con oraciones
y con lloros;
los caballeros famosos,
con trabajos y aflicciones
contra moros".
http://fidesibera.blogspot.com/
¡Hay una rama de los Borbones que salió chunga y este es su máximo exponente creo de sobra sabido por todos!
Mi honor, la lealtad,
mi fuerza, la voluntad,
mi fe, la catolicidad,
mi lucha, la hispanidad,
mi bandera, la libertad,
mi arma, la verdad,
mi grito... ¡despertad!
mi lema... ¡¡Conquistad!!
Los carlistas ante la nueva legislación abortista
05.03.2010. Don Juan Carlos de Borbón acaba de firmar la “Ley Orgánica 2/2010, de salud sexual y reproductiva y de interrupción voluntaria del embarazo”, su segunda “ley del aborto”. En 1985 sancionó una primera ley despenalizadora que, promovida por el PSOE, apoyada por el PP, y definida por Mariano Rajoy y sus máximos dirigentes como una ley “de consenso” ha provocado la muerte de 1.300.000 víctimas inocentes y allanado el camino para esta nueva vuelta de tuerca.
Ante esta situación, la Junta de Gobierno de la Comunión Tradicionalista Carlista, -único partido político que propone para España la monarquía tradicional y uno de los pocos que defiende íntegramente los valores no negociables- se ve en la obligación de hacer las siguientes consideraciones a la opinión pública:
1º. Como grupo político, los carlistas no entraremos a juzgar la conciencia de don Juan Carlos ni si sus actuaciones públicas merecen o no una reprobación más o menos contundente por parte de la jerarquía de la Iglesia. Los obispos han recordado con claridad suficiente que cualquier político o gobernante que sea corresponsable o público partidario de cualquier legislación abortista no puede ser admitido en la Sagrada Comunión. Respecto a don Juan Carlos lo único que nosotros constatamos es que en el BOE de 4 de marzo no se limita, como si fuera un notario, a dar fe de un acuerdo del Parlamento sino que con su su firma otorga validez legal a la nueva ley. Concretamente el actual jefe del estado ha firmado lo siguiente:
“A todos los que la presente vieren y entendieren. Sabed: Que las Cortes Generales han aprobado y Yo vengo en sancionar la siguiente ley orgánica. (…) Por tanto, Mando a todos los españoles, particulares y autoridades, que guarden y hagan guardar esta ley orgánica. Madrid, 3 de marzo de 2010. JUAN CARLOS R.”
2º. Don Juan Carlos ha firmado la nueva ley sin expresar el menor gesto de desaprobación. Ante quienes afirman que ha sido obligado a firmar nos preguntamos: ¿cómo es posible que alguien que dice ser rey y monarca no goce de libertad siquiera para oponerse a una ley injusta, en defensa de los españoles más indefensos?. Que una persona, supuestamente la máxima autoridad del estado, sea declarada no responsable por el sistema constitucional es una vergüenza tanto para quien firma permitiendo que le sigan llamando rey como para todos los españoles, que se ven inmersos en un régimen en el que, como en la dictadura nazi, la orden recibida parecería excusar la voluntad libre y responsable de cada conciencia individual.
3º. Por otra parte la perversidad de la nueva ley del aborto no nos puede hacer olvidar que si hemos llegado a esta situación de definir legalmente la eliminación de seres humanos inocentes como un derecho es gracias a la sanción previa de otras muchas leyes anticristianas que en las últimas décadas y en el marco de una Constitución enemiga de la raíz católica de España han ido proponiendo, apoyando o sancionando el PSOE, el PP y el jefe del estado: nos referimos a las leyes permisivas del divorcio, del divorcio-exprés, de manipulación de embriones, de las píldoras abortivas, de las parejas de hecho, del llamado “matrimonio homosexual”, de la “Educación para la ciudadanía”, etc.
4º. Una vez más pedimos a los españoles que sepan distinguir entre la llamada “monarquía constitucional” y la verdadera “monarquía tradicional”. La primera, con la figura de un rey no-responsable fiel servidor de la revolución relativista, otorga al vigente sistema partitocrático una apariencia respetable. La segunda, que además de la legitimidad de origen planteada históricamente por el legitimismo carlista exige una legitimidad de ejercicio coherente con la tradición política española, es la única que podría garantizar la necesaria estabilidad de las instituciones poniéndolas a resguardo de los vaivenes partidistas.
5º. Por último, queremos animar a los defensores de la causa pro-vida para que no decaigan en su lucha por la verdad de la dignidad humana que tiene su raíz más profunda en la dignidad de los hijos de Dios. Junto a ellos estaremos siempre los carlistas, apoyando cuantas manifestaciones contra el aborto se realicen siempre que vayan encaminadas al primer objetivo verdaderamente pro-vida: la abolición total de cualquier legislación que no proteja la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural.
Junta de Gobierno de la Comunión Tradicionalista Carlista
5 de marzo de 2010
Al rey la hacienda y la vida hay que dar
pero el honor es patrimonio del alma
y el alma sólo es de Dios. (Calderón)
Don Pedro sí que lo tenía claro.
Desde el siglo XVII ha llovido mucho, pero sus palabras son eternas.
Claro que la palabra "honor" hoy día a muchos le suena a chacota.
¡Hombre estimado amigo yo lo había visto, y me dije para mis adentros muy Juancarlista veo yo a este hombre, pero últimamente como algunos tenemos pecadillos inconfesables como un servidor, el chocolate, la baraja española entre amigos y en casa, el domino, los pinchos que hace mi suegra y el vino de rioja............pues como que me hice el "sueco".
Mi honor, la lealtad,
mi fuerza, la voluntad,
mi fe, la catolicidad,
mi lucha, la hispanidad,
mi bandera, la libertad,
mi arma, la verdad,
mi grito... ¡despertad!
mi lema... ¡¡Conquistad!!
Cita:
Aborto libre hasta las 14 semanas. En este período del embarazo, la mujer puede abortar sin dar explicaciones a nadie y sin necesidad de autorización.
Hasta la semana 22..
Entre la semana 14 y 22 de la gestación, la mujer puede abortar en caso de grave riesgo para su vida o salud (con un dictamen emitido por dos médicos especialistas, del que se puede prescindir en caso de urgencia), o si el feto padece graves anomalías. Como el riesgo para la salud de la madre ha sido hasta ahora el coladero para el aborto a petición, en la práctica el aborto libre se amplía hasta las 22 semanas del embarazo.
Después de la semana 22. También se admite el aborto hasta el final del embarazo si hay malformación incompatible con la vida del feto o éste padece una enfermedad de extrema gravedad e incurable. En el primer caso, se requiere el dictamen de dos médicos especialistas distintos del que practique el aborto. En el segundo, el diagnóstico deberán confirmarlo tres médicos
Con esta nueva ley se da además una aberración jurídica.
Tal como queda configurada la nueva tipificación del aborto, se daría el excepcional caso en materia penal, de que es una cantidad o un periodo de tiempo (hasta 14 semanas) el que otorga derecho a abortar o, al contrario, lo convierte en delictivo si pasa de ese tiempo. Esto jamás se da en la tipificación de otros delitos.
Es decir; el robo siempre está configurado como delito independientemente de la cantidad robada; las lesiones también siempre son delictivas; las falsificaciones y falsedades etc.
¿¿Alguien se imagina a un legislador diciendo que toda persona tuviera derecho a robar hasta un valor de, por ejemplo, 300 euros, pero que a partir de 301 euros sería delito??
¿O que toda persona tuviera derecho a lesionar a otra... pero que sería delito a partir de romper algún hueso?
¿O que toda persona tuviera derecho a amenazar, falsificar, sobornar, violar, etc... pero que solo sería delito a partir de una determinada cuantía o tiempo etc??
Señores; nos encontramos aquí con una monstruosidad jurídica que no tiene nombre.
Pero ¿cómo puede haber una figura jurídica (el aborto) que sea a la vez objeto de derechos por un lado... y a la vez ¡¡nada menos que delito!! en función de una mera circunstancia temporal??
Una acción o será buena siempre o será mala siempre. Pero jamás un tiempo o una cantidad podrán hacerla buena o mala en sí misma, como sucede en esta nueva aberración jurídica .
Yo repito lo mismo por enésima vez: Prefiero a un moro y a un comunista antes que a un democristiano. O también prefiero a un liberal más consecuente, esto es, ateo de plano.
Y el otro día, Ana Pastor del PoPó diciendo que la ley que estaba antes (No menos genocida) tenía consenso. Eso en la radio de los obispos sin que nadie levantara la voz. Y Martínez Camino envalentonado pero reculando luego ante Juanca. Por qué será que ya a nadie sorprende, y que a uno se le siguen viniendo imágenes de Oppas y witizianos....
pues es una verdad como un templo
Un Rey Cristiano, es rey por obra y gracia de Dios. Sino obedece a Dios el, ya ni es Rey ni es nada.
Pero en el fondo hace lo que los que no quieren una monarquia desean, luego va en contra suya totalmente. Supongo que se habra mentalizado de que su hijo jamas sera coronado.
Que la Conferencia Episcopal excomulgue a Juan Carlos de Borbon! Un rey que es un sinverguenza!
STAT CRUX DUM VOLVITUR ORBIS
Ussía asegura que el Papa autorizó al Rey firmar la ley del aborto - YouTube
Alfonso Ussía afirma que el Papa autorizó al Rey firmar la ley del aborto en Lágrimas en la lluvia, el programa de cine y debate de Juan Manuel de Prada en Intereconomía TV, que abordaba este viernes el siempre candente dilema entre monarquía y república.
Lo había ilustrado la película Mi calle (1960), de Edgar Neville, y junto a los conductores del programa, Prada y María Cárcaba, habían tratado al respecto Miguel Ayuso, catedrático de Derecho Constitucional, Dalmacio Negro, catedrático emérito de Ciencia Política, Pedro González-Trevijano, rector de la Universidad Rey Juan Carlos, y el escritor Alfonso Ussía.
En los minutos finales de la emisión se planteó la diversa problemática moral que se puede suscitar en una monarquía parlamentaria en el caso de que los reyes sean católicos. Los casos más célebres han sido los de Enrique de Luxemburgo (que en 2008 se negó a sancionar la legalización de la eutanasia), Balduino de Bélgica (que en 1990 se negó a sancionar la ley del aborto) o Don Juan Carlos (que la sancionó por dos veces, en 1985 y 2010).
Fue entonces cuando tomó la palabra Alfonso Ussía y lanzó la gran bomba informativa de la noche: «El Rey fue a ver al Papa diez días antes y el Papa le dijo: "Cumpla usted con su obligación. Su deber es cumplir con la Constitución". El Rey fue personalmente a ver al Papa a pedirle un poco la venia».
Ante la trascendencia de la afirmación, Prada preguntó a Ussía si tenía «certeza» de eso: «Absoluta certeza. Absoluta certeza. Tuvieron una larga conversación, el Rey le expuso al Papa sus problemas de conciencia por la firma de esa ley y el Papa le dijo: "Tiene usted que cumplir con sus obligaciones constitucionales"».
Fuente: Religión en Libertad
SI A LA VIDA! NO AL ABORTO!
No sé si habían visto estas declaraciones de Ussía, a mi personalmente me parece extraño que el Papa diese el visto bueno a que el rey firmase la ley del aborto, pues el propio Papa se ha pronunciado varias veces contra el aborto. Sería una hipocresía por su parte. Me parece más bien otro acto sumiso del "rey" Juan Carlos para conservar su posición privilegiada, pues como se puede ver su autoridad para no firmar cualquier ley (aunque personamente no le agradase) es nula. Y firmando ya da vía libre, y por tanto es cómplice, de este infanticidio.
Las palabras del Papa me parecen, si es que las dijo, bastante vagas. ¿La constitución obliga al "rey" a aprobar con su firma toda ley? Porque precisamente, si él es quien tiene que aprobarla con su firma, eso presupone la posibilidad de no aprobarla.
Los juanistas, y después los juancarlistas siempre han injuriado, mentido y perjurado con tal de satisfacer sus intereses. Esta es su típica táctica, meter el marrón a otros.
Summun ius summa iniuria, Etsi homines falles deum tamen fallere non poteris.
Nihil sine Deo
Actualmente hay 1 usuarios viendo este tema. (0 miembros y 1 visitantes)
Marcadores