Lo que más me fastidia de la clase política es como favorece a la religión islámica al tiempo que quita prestigio a la tradicional religión católica. Aún no siendo católico no entiendo a que viene apoyar a unos extranjeros, que tienen unos valores culturales radicalmente diferentes (y en pocas palabras, peores que los nuestros) construyendo todas esas mezquitas. Es un contrasentido, en todo caso si el gobierno apoyase alguna religión tendría que ser la católica que fue la base de la unión de España y aunque uno no sea creyente, es inevitable darse cuenta del enorme valor histórico-cultural que tiene para nuestra sociedad.
En mi opinión la génesis del problema esta en la actual concepción del multiculturalismo como algo positivo, muchas instituciones se vanaglorian de la diversidad étnico/religiosa/cultural que administran, como si fuese un tipo especial de pez de acuario muy delicado de mantener, que sólo unos pocos consiguen mantener vivo y criarlo. Habría que convencer primeramente a la opinión pública (y los libros que estoy harto de leer) que un estado policultural es una conflicto constante (ejemplo número uno, la India) para ver quien sobrepone sus valores, y nada de lo que estar orgulloso. Creo que en España este conflicto esta empezando a notarse, con cada vez más ejemplos de movimientos que reclaman su identidad cultural (tanto cristianos como musulmanes) en este estado tan cosmopolita. Me temo que de aqui a 50 años estemos como los hindúes invadidos por otra cultura, quizás no viene mucho a cuento pero empatizo sobremanera con los indios, que fueron invadidos por los musulmanes y más tarde cuando por fin alcanzaron un cierto grado de independencia, fueron subyugados por el imperialismo británico.
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