ORDOÑEZ, conmigo siempre has sido amable y muy majo. Lo del "carácter" lo decía en ese sentido humorístico que se suele dar a la expresión. Perdona si te pareció otra cosa, pero reconoce que de vez en cuando sí pareces un poco "duro". Vamos, que te pasa como a mí, que la diplomacia no se hizo para nosotros. Mi amabilidad es aparente, en vivo y en directo soy más áspero. Creo que en mi caso es también la edad, y la "gilipollez instaurada" en esta sociedad. En privado, entre mis familiares y amigos, es conocida esta frase mía: "No es más tonto, porque no sabe cómo.
Contigo tengo una especie de pacto consistente en no discutir innecesariamente, si algo no me gusta me callo, si no conozco el tema, también o a lo sumo pregunto. Unicamente, si controlo el asunto intervengo hasta un límite, otro tipo de discusión se convierte en estéril, y es que el problema radica en que no hay contacto directo. De cualquier modo hay que admitir dos cuestiones: una, siempre hay otros que saben más que uno y, dos, hay que tener la humildad de admitirlo, pero conservando una cierta autonomía personal. Al fín y al cabo es cierta aquella máxima de ORTEGA de "Yo soy yo y mi circunstancia".
Marcadores