Hermano Hyeronimus: quisiera consultarle, y a quien quisiera contestar, por supuesto, si es que nuestra Iglesia Católica sigue considerando al suicida tan taxativamente fuera de Gracia y exento de salvación.
Y lo pregunto, por que escuché decir: qué sabes tú si en ese segundo último de agonía este hombre pidió perdón por su acto suicida?. Una persona que se arroja al vacío tarda algunos segundos en impactar; qué sabemos nosotros si en ese lapso no se arrepintó de su desición?.
Yo mismo asistí a funerales de suicidas(un amigo mío se disparó en la sien), y me sorprendió ver a un sacerdote realizando un oficio, cuando mis mayores repiten, sin lugar a dudas ni medias tintas, que un suicida es alguien que atentó contra la vida, despreciando el Don gratísimo de Dios, por lo cual Éste le repele.