Tema: Escándalo abortista en parroquia gijonesa

Esto no tiene nombre. No hay palabras. Es el colmo. Yo he sabido de casos de misas por suicidas, y me horrorizaba. Pero por una abortista ya es el colmo de los colmos.

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Por su canción para Romina, León Gieco tiene que declarar ante un juez

El músico fue denunciado por apología del delito, por su tema Santa Tejerina, dedicado a la joven jujeña que mató a su hija recién nacida. Lo querelló el hombre acusado de violar a Romina.
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Por Mariana CarbajalEl álbum Por favor, perdón y gracias sigue dándole dolores de cabeza a León Gieco. Primero fue la inclusión del tema que entonaba con el líder del grupo Callejeros, que le generó inconvenientes con el sello de la banda, Pelo Music, y debió quitar por presión de familiares de víctimas de Cromañón. Ahora, la canción Santa Tejerina, dedicada a la joven jujeña que mató a su beba recién nacida, fruto de lo que ella denunció como una violación, llevará al cantautor a los tribunales. Por “santificar” a Romina en su letra, Gieco fue denunciado por “apología del delito” y deberá presentarse el próximo lunes en el juzgado de Instrucción en lo Penal de la localidad jujeña de San Pedro, a 50 kilómetros de la capital provincial, que lleva adelante el expediente.
La causa no fue iniciada por ninguna entidad católica como podría esperarse. La denuncia corrió por cuenta del abogado Miguel Míguez Agraz, representante legal del vecino a quien Tejerina señaló como su presunto violador. Este hombre, de 42 años, resultó sobreseído por el mismo juez sampedrino, Jorge Osvaldo Samman, que ahora deberá investigar si Gieco cometió “apología del delito” con su canción en la que dice: “Santa Tejerina es la santa preferida de los que piden perdón/ es una santa desconocida recién aparecida, según la gente pecó/ matando al hijo presa de un castigo, del maltrato y de una violación/ creyendo así conseguir toda la libertad” (ver recuadro). El denunciante cuestiona que se “santifique” a la mujer que mató a la criatura de la que –según declaró públicamente– reclamaría su paternidad.
Según trascendió, en la presentación solicitó el cese de la circulación del CD. Apenas salió a la venta, en julio, por el planteo de familiares de víctimas de la disco de Once, Gieco decidió sacar de circulación el álbum Por favor, perdón y gracias con la canción Un minuto, donde aparecía la voz de Patricio Santos Fontanet, de Callejeros, y realizar una nueva edición.
Ayer, el músico santafesino todavía no había sido notificado de la citación fijada para el 5 de septiembre, confiaron fuentes de su productora, que informaron que Gieco se encuentra de viaje por el interior del país y recién regresará a Buenos Aires el fin de semana, para cuando tiene previstos recitales.
En recientes declaraciones al diario La Capital, de Rosario, Gieco opinó sobre la denuncia en su contra radicada en Jujuy. “Es ridículo que alguien pueda pensar que santificar a Tejerina no es sólo una metáfora. En realidad, la santificación de Tejerina es un pedido de indulto, por la violación que sufrió esa piba antes de matar a su hijita.” Según pudo saber este diario, en el entorno del cantante esperaban una demanda del hombre señalado como el violador por Romina, pero no por apología del delito sino por calumnias, debido a que en la letra del tema se da como un hecho la violación, cuando para la Justicia nunca existió. De acuerdo con la versión del vecino de Romina, se trató de una relación consentida.
Gieco compuso el tema hace más de un año. Incluso, había pensado titular su nuevo disco como Santa Tejerina, en el contexto del debate que se había generado alrededor de la causa contra la joven jujeña, finalmente condenada el 10 de junio último por la Sala II de la Cámara Penal de la provincia, a 14 años de prisión por el homicidio de su bebé agravado por el vínculo.
Durante el juicio oral, Romina declaró que ocultó la supuesta violación y el embarazo por miedo y por vergüenza hasta que el 23 de febrero de 2003, cuando tenía 19 años, dio a luz a la criatura en el baño de la casa en la que vivía con sus hermanas, en donde la puso en una caja de cartón y la apuñaló. “Vamos a bailar que ya te perdoné/ aunque te quemen en la hoguera como fue una vez”, le escribió Gieco. Y ahora deberá dar explicaciones en la Justicia.

Hermano Hyeronimus: quisiera consultarle, y a quien quisiera contestar, por supuesto, si es que nuestra Iglesia Católica sigue considerando al suicida tan taxativamente fuera de Gracia y exento de salvación.
Y lo pregunto, por que escuché decir: qué sabes tú si en ese segundo último de agonía este hombre pidió perdón por su acto suicida?. Una persona que se arroja al vacío tarda algunos segundos en impactar; qué sabemos nosotros si en ese lapso no se arrepintó de su desición?.
Yo mismo asistí a funerales de suicidas(un amigo mío se disparó en la sien), y me sorprendió ver a un sacerdote realizando un oficio, cuando mis mayores repiten, sin lugar a dudas ni medias tintas, que un suicida es alguien que atentó contra la vida, despreciando el Don gratísimo de Dios, por lo cual Éste le repele.

Hay una conocida anécdota de Santa Teresa en la que santa vio horrorizada como un hombre se suicidaba arrojándose a un río. Como era santa y el Señor le hablaba, la traquilizó diciéndole: "Tú no sabes si entre el puente y el río estaba Yo". Mientras hay vida hay esperanza y basta un momento de arrepentimiento para salvarse. Como al final de Don Juan Tenorio, "un punto de contrición / da a un alma la salvación / de toda una eternidad". Por eso, solo Dios sabe con seguridad qué pasó en el último momento en el alma de la persona. Incluso si la muerte es instantánea (por ejemplo, si se mata de un disparo en la cabeza), podría haber alguna causa atenuante o eximente, si bien sería raro. Por ejemplo, si el suicida no está lúcido sino loco. De todos modos, el suicidio es un atentado tan grave contra la vida y un pecado tan tremendo contra Dios que para evitar el escándalo la Iglesia siempre prohibió celebrarles funerales a los que se quitan la vida. Pero uno siempre puede rezar en su fuero interno por el suicida, por si acaso alcanzó a arrepentirse. Esto sí está permitido; oraciones públicas y misas no. Pero en los tiempos que corren se hacen muchas coss que no deberían hacerse.

Otra cosa, hermano Hyeronimus:Tal vez las actitudes de algunos sacerdotes confundan a los fieles. Cierta vez, mientras conversabamos con un sacerdote amigo acerca de bueyes perdidos, vinieron a solicitarlo para un oficio funerario de un joven del que sospechaban se había suicidado. El cura me invitó a que lo acompañase y le sirviese de ayudante(solía rezar la Liturgia de las horas con él). En el camino él mismo me recordó que ANTIGUAMENTE no estaba permitido oficiar para suicidas. Ni siquiera que el ataúd llevara el crucifijo, pero que a él le parecía una crueldad innecesaria negar unas oraciones a los deudos, teniendo en cuenta el trance que atravesaban.
Esto ya es común, por lo menos en Argentina. No se hacen distingos entre suicidios, muertes naturales, o accidentes, etc.
Puede la costumbre, o la "piedad" de algunos sacerdotes, abolir una ley eclesiástica?.

Por supuesto que ni la costumbre ni la "piedad" pueden ponerse por encima de lo que manda la Iglesia.

Según lo que se lee en esta noticia, la mujer no abortó de buenas a primeras, sólo quiso salvar su vida cuando vio que salvar la de su hijo era imposible:

El problema del embarazo de la joven fue detectado desde un primer momento. El feto presentaba una severa malformación en el cráneo incompatible con la vida. La joven aguardó con la esperanza de que durante el desarrollo se corrigiera ese problema, pero tal opción no llegó. Tras pedir consejo a varios especialistas (el último de ellos, hace tan sólo unos días en Barcelona), aceptó la opción de interrumpir el embarazo por consejo médico.

Si hizo mal o siguió un mal consejo médico, lo ha pagado de todos modos con su vida. No veo por qué no se le ha de poder celebrar un funeral a una mujer que sólo quiso abortar cuando entendió que su hijo iba a morir de todos modos. Mejor que viva una persona que que mueran dos. Y por decir esto no creo que sea abortista.

Aunque el hijo vaya a morir, o la madre, o ambos, todavía vale la pena dejarlo nacer. Mira estos casos:

http://www.fluvium.org/textos/aborto/abo113.htm

http://www.fluvium.org/textos/vidahumana/vid198.htm

http://www.fluvium.org/textos/mujer/muj210.htm

http://www.fluvium.org/textos/aborto/abo105.htm

http://www.fluvium.org/textos/mujer/muj255.htm

http://www.fluvium.org/textos/aborto/abo147.htm

http://www.fluvium.org/textos/aborto/abo135.htm

Estimados:
¿alguno de ustedes abria cuales son las normas canonicas que se violaron al darle cristiana sepultura a la mujer que iba a abortar?
Puesto que en la nota se habla de "normas de derecho canonico" y no se establece puntualmente cuales son.

Saludos, gabriell-a

Me he leído los casos que has enlazado, Hyeronimus, y realmente son conmovedores. Pero también hay que admitir que no es una decisión tan fácil que alguien arriesgue o dé su vida por otra persona, aunque si es el hijo propio no debería ser tan difícil (por el amor que ha de sentir una madre por su hijo). Pero no has mostrado ningún caso en el que murieran madre e hijo por querer seguir adelante con el embarazo cuando el hijo fuese a morir claramente, eso podría hacerle a uno pensar si realmente valió la pena. Aunque también es cierto que en el caso de la gijonesa de poco le sirvió hacer lo que hizo. Para mi es un tema complicado, pero estos suponen como mucho un 1% de los casos de aborto. El resto de las que abortan por comodidad si que pueden irse al diablo. En cuando al caso de violación, no soy partidario de que se aborte, pero si la ley ha de ilegalizar el aborto en este supuesto también ha de establecer la pena capital para el autor del delito, de otro modo estaría descompensado.