Tema: Parodia de carlismo en Asturias

CONTRA LA TIRANÍA PARTITOCRÁTICA
LOS CARLISTAS RENUNCIAN A PRESENTAR CANDIDATURAS


Aunque no aceptamos en ningún caso ni el sufragio universal inorgánico ni la confusión entre representación y potestad en que se basa el sistema imperante, los carlistas hemos exigido siempre coherencia a quienes nos imponen este régimen extraño; y hemos pedido que, para dar al menos una sombra de representatividad a los cargos electos y para impedir que todo el poder se concentre en los partidos políticos y en sus dueños, se sustituyeran las listas cerradas y bloqueadas por listas abiertas o por candidaturas individuales.

No sólo no ha sido así, sino que los partidos políticos del sistema han ido absorbiendo y fagocitando todas las estructuras. Una nueva vuelta de tuerca en ese proceso tiránico se ha dado hoy, con la aprobación por el Congreso de los Diputados la llamada "Ley Orgánica para la Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres".

En la vorágine de ideología de género y de promoción de todo lo antinatural y antisocial en que nos han metido políticos, medios de información y organismos internacionales, la nueva ley consolida muchos de sus aspectos más reprobables. En particular la paridad obligatoria, que supone que no importa el mérito, ni la preparación, la valía de hombres o de mujeres. Tampoco importa su voluntad --se desprecia y penaliza a la mujer que decide dedicarse a su familia o a su hogar; se desprecia y penaliza a la familia y a la maternidad--, o, en el caso de las organizaciones políticas, la voluntad de sus correligionarios.

Las listas cerradas y bloqueadas se bloquean aún más. Ya para las próximas elecciones autonómicas y municipales deberán confeccionarse candidaturas en las que las mujeres, al menos, deberán estar representadas en un cuarenta por ciento de las listas, en tramos de cinco puestos.

La irracionalidad y la tiranía paritaria se extiende también a los consejos de administración de las empresas, lo cual augura para la economía española un futuro aún más negro.

Las frases del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, confirman que nos vemos ante una ley y ante una oligarquía gobernante mesiánicas, totalitarias, tiránicas: "hoy es el primer día de una sociedad distinta", que quedará transformada "para bien, radicalmente y para siempre".

Ante semejante situación, el Carlismo asturiano se rebela. La Comunión Tradicionalista de Asturias había anunciado su propósito de presentar candidaturas en las próximas elecciones autonómicas. Pues bien: no lo haremos en semejantes condiciones. Las que había ya eran malas; el régimen imperante y sus procedimientos son radicalmente ilegítimos; ahora se está llegando, por esta y por otras leyes y prácticas, a una situación que exige considerar otras medidas de resistencia.

Es nuestra política no presentar candidaturas propias a las elecciones municipales, sino favorecer la formación de candidaturas verdaderamente independientes (algo también muy difícil con las leyes actuales, y con esta nueva ley aún más). Así pues, si no cambia la situación, no habrá candidaturas carlistas en las próximas elecciones autonómicas en Asturias.

Sólo queda animar la resistencia social, al margen de la partitocracia y de los políticos parásitos; al margen de un régimen cuya absoluta ilegitimidad denunciamos. Reconstruyamos la sociedad. ¡Abajo la oligarquía! ¡Abajo la dictadura!


Oviedo, 15 de marzo de 2007.


Comunión Tradicionalista del Principado de Asturias
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Junta Carlista del Principado

DECLARACIÓN DEL VEINTICINCO DE MAYO

Hace ciento noventa y nueve años "deliberó la Junta con asistencia del Real Acuerdo, y por el que se celebró en el día de hoy, llevar á efecto el armamento del Exército Defensivo Asturiano, en obsequio de la Religión, de la Patria, y de la común felicidad".

A sólo un año del bicentenario, imperan en Asturias las ideas del la Revolución francesa que esparcían las tropas napoleónicas, y los sucesores de los afrancesados (liberales, populares, socialistas, comunistas y demás componentes de la oligarquía política, mediática y financiera) estrangulan la vida de nuestra región, enemigos jurados de "la Religión, de la Patria y de la común felicidad" por las que se alzaron nuestros antepasados, y continuadores de los traidores que en 1834 suprimieron definitivamente la Junta General del Principado de Asturias, secular defensora de nuestros intereses y libertades.

En nueva maniobra de distracción, llaman a los asturianos a votar el domingo veintisiete, en unas elecciones autonómicas y municipales que no son sino farsa de caciques, logreros y oligarcas.

Las elecciones autonómicas añaden el insulto de dar al parlamento regional el nombre glorioso de la Junta General del Principado, cuando la inútil asamblea de hoy no sólo no tiene nada que ver con aquella, sino que además significa exactamente lo contrario.

Las elecciones municipales están radicalmente viciadas, pues se trata de llenar una vez más las casas consistoriales con los partidos políticos y sus clientelas, sin verdadera representación de los concejos y contra los intereses legítimos de sus vecinos.

A todo esto, el régimen imperante ha añadido la "ideología de género", en forma de obligatoria paridad de sexos en las listas electorales, en obscena exhibición de totalitarismo, contra el sentido común y contra la libertad.

Repásese la historia. Sólo la Junta Carlista del Principado es continuadora de la legitimidad de aquella Junta General de mil ochocientos ocho; sólo el Carlismo mantiene los ideales de aquella, que eran los de Dios, Patria, Fueros y Rey. Como cada año, esta Junta da la voz de alarma ante la situación intolerable que Asturias atraviesa. Los políticos y ciertos empresarios y capitalistas actúan como los afrancesados de mil ochocientos ocho. Para mantenerse en el poder y continuar la explotación económica de éste en su beneficio. Con tal fin no dudan en contribuir a la disgregación de España y a su sometimiento al extranjero; a la devastación de nuestra región en aras del beneficio rápido; al envilecimiento moral e intelectual de los asturianos mediante políticas laicistas, abortistas, aberrosexualistas y multiculturalistas, y mediante la destrucción planificada de la enseñanza y de la familia.

Urge poner fin a la pasividad con que los asturianos están presenciando la transformación de su región en una especie de urbanización tercermundista.

Urge sacudirse la plaga de los partidos políticos y de sus colaboradores. Un primer paso debe ser el rechazo a su juego, a su farsa electoral. Por eso, en vez de recordar el Asturias nunca vencida de nuestras banderas de hace casi doscientos años, terminamos este año con este llamamiento:

ABSTENCIÓN
EL 27 DE MAYO, NO VOTES

Oviedo y Mayo 25 del 2007



Comunión Tradicionalista del Principado de Asturias
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