No soy del Opus y tengo amigos que pertenecen a él, no comulgo con alguna de sus ideas, aunque son gente maravillosa. Pero lo del papa no tiene nombre, se mete en unos sembraos que no debe pisar y tampoco sabe salir bien de ellos.
Lo que le están haciendo a los cristianos del mundo y nuestra pasividad, será un pecado que nos perseguirá siempre.