Pues ya se lo han dicho los foreros:
La Iglesia Católica es y deberá ser Una, Santa y Apostólica. Manda quien puede, obedece quien debe. Quien La quiera dividir no Le hará buen servicio. Irmao de Cá.
Los designios divinos son inescrutables. No podemos saber si Dios permitiría esto o aquello. Garza.
Otro peligro del sedevacantismo es que al estar separado de la Iglesia no se puede participar de los sacramentos, sin los cuales es imposible estar en gracia de Dios. Hyeronimus.
El sedevacantismo basa su determinación en una aplicación retorcida de la infalibilidad papal: asumen que todo lo que dice el Papa tiene el mismo valor infalible y obligatorio. Y eso no es así. Cosas como el falso ecumenismo o la libertad religiosa no son obligatorias de creer para nadie, por tanto uno puede perfectamente ignorarlas y combatirlas sin ser "rebelde" por ello (de hecho, la rebeldía estaría en aceptarlas contra la doctrina católica). Es lo mismo que hacen los modernistas cuando las asumen acríticamente y quieren obligar a los demás a aceptarlas con el argumento de que "lo dice/hace el Papa". Niet. No es suficiente. Donoso.
Y Valmadian en su exposición también ha estado acertado.
Por lo tanto, la Iglesia Católica en su humana composicion aunque yerre, seguira siendo nuestro referente. A mi no me gusta el Papa Francisco, como vicario, pero tengo que aceptarlo. Y no por ello, dejare ni mi fe, ni de reconocer lo bueno que acometa, ni mucho menos de asistir a la Iglesia, y a no orar por él, cuando el padre nos lo pide en la homilia.
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