Búsqueda avanzada de temas en el foro

Resultados 1 al 11 de 11

Tema: Satanás en la Ciudad

Ver modo hilado

  1. #4
    Avatar de ALACRAN
    ALACRAN está desconectado "inasequibles al desaliento"
    Fecha de ingreso
    11 nov, 06
    Mensajes
    5,445
    Post Thanks / Like

    Re: Satanás en la Ciudad

    Cap. VI (III)... –¿Será figura de la Democracia Revolucionaria la Bestia del Apocalipsis?

    Convengo muy sinceramente en la conclusión del señor Multi y me dispongo a retirarme; pero mi interlocutor no se menea. Parece absorto en profunda meditación, y, de repente, con una imperceptible vacilación en la voz, continúa:

    -Antes de terminar no creo inútil conducirle a un puesto de observación aún más elevado y amplio y descubrir ante usted nuevos horizontes. Le haré partícipe de una suposición que se ha impuesto hace mucho tiempo a mi reflexión y no cesa de obsesionarme. Ante ese espectáculo del que acabo de descubrir algunos aspectos, yo me pregunto si no estaremos asistiendo a algunos de los mayores fenómenos de descomposición y de apostasía general previstos y anunciados para uno de los últimos tiempos del mundo. Concretando exactamente mi pensamiento, ¿recuerda usted los capítulos XIII y XIV del Apocalipsis?

    -Ya lo creo. Se trata de los pasajes dedicados a las dos Bestias, ¿no es cierto? Pero le prevengo con toda franqueza, señor abate, que le acompañaré eventualmente, y con mucha repugnancia, a una excursión por el terreno de la Revelación de San Juan.

    -¿Y eso por qué, amigo mío?- pregunta el señor Multi con sorpresa.

    -Oh, muy sencillamente: porque el impenetrable misterio en que se envuelve se presta a demasiadas interpretaciones utópicas y a suposiciones aventuradas y falaces, y en todas las épocas se ha abusado de ellas para sacar sin escrúpulo las más discutibles aplicaciones a los acontecimientos de actualidad, y en la duda irreductible, yo preferiría abstenerme de ello.

    -No niego de ningún modo que muchos hayan utilizado la profecía juanista con imprudencia y ligereza. Sin embargo, usted convendrá en que, si la Iglesia la ha colocado en la categoría de los libros inspirados, es porque pensaba que teníamos que sacar de ella enseñanzas útiles, y, si el amor propio y la vanidad humana han ensayado con frecuencia al adaptarla a hechos demasiado localizados o efímeros para merecer la comparación, no quiere esto decir que no estuviera justificado en otra época.

    -¿Y usted piensa que hacer ese honor tan poco envidiable a la nuestra no es valorarla demasiado?

    -Líbrese usted de hablar con ironía. Hay, a pesar de todo, algunos motivos serios y tristes para creer que puede suponerse sin desatinar y hasta con alguna verosimilitud. Recuerde que hace un momento convenía usted conmigo en que la Revolución señala una vuelta muy grande en la historia del mundo por su doctrina universal, por su malicia intrínseca, por su oposición radical a las verdades cristianas, por la amplitud de su extensión y por las intensas deformaciones intelectuales y morales que ha producido.

    -Sin embargo, ¿qué relación puede ver usted entre la Bestia del mar y los dogmas revolucionarios?

    -No olvide usted que los intérpretes admiten que el mar o abismo es sólo una imagen para designar las agitaciones y los trastornos de los pueblos. Según su opinión, la Bestia juanista, por referencia a las cuatro bestias de Daniel, que representan cada una un imperio, y de las cuales parece ésta la síntesis, significa el poder político puesto al servicio del Dragón, y este Dragón, nos dice San Juan explícitamente, por una parte, que es “la serpiente antigua, el Diablo y Satanás”, y, por otra parte, que él da a la Bestia su trono y su autoridad. Por consiguiente, la Bestia apocalíptica es la figura de una colectividad política bajo la influencia demoníaca. Tal es la opinión del Rvdo. P. Albo. En cuanto al Rvdo. P. Péret, ve en ella “la potencia diabólica de perdición de las colectividades humanas”, lo cual viene a ser casi lo mismo.

    -Le veo venir, señor abate. Puestas así las premisas, va usted a añadir triunfalmente: Nosotros hemos reconocido que los postulados revolucionarios fundamentales son de esencia satánica, luego la Bestia apocalíptica es la figura profética de la Revolución.

    -Pues el silogismo no estaría tan mal construido, y me parece, además, corroborado por el hecho de que la Bestia constituye un excelente símbolo para designar una doctrina estúpida y absurda por naturaleza, digna de ser representada por un bruto, ya que lleva consigo la negación de todo elemento espiritual y divino; elimina la razón, o, al menos, la somete a la cantidad ciega y pretende hallar la capacidad en la incompetencia, y establece el orden por la anarquía. La Boétie, antiguamente, ¿no habla en el mismo sentido del populacho?

    -Pero, veamos… Yo creía a los comentaristas casi unánimes para decir que la Bestia de San Juan es la alegoría del emperador Nerón, prudentemente camuflada, y esta Bestia, a pesar de la multiplicidad de sus encarnaciones, no es, sin embargo, el ave Fénix para que usted la haga resucitar arbitrariamente al final del siglo XVIII.

    -Usted no tiene en cuenta la idea desarrollada por los comentaristas más autorizados de que, en la literatura profética, el valor de un símbolo no se agota, por necesidad, con una sola aplicación. El género apocalíptico practica el plurisimbolismo simultáneo o sucesivo. En términos tal vez más expresivos: los símbolos son polivalentes. Puede, pues, admitirse sin dificultad, que la Bestia juanista representa una posibilidad de reviviscencia histórica perpetua. Puede muy bien designar, en particular, al mismo tiempo al feroz Nerón y a la Democracia de nuestro tiempo. Entre esas dos formas de tiranía hay, además, numerosas semejanzas y puntos de contacto…

    -No dudaba que usted poseía un entendimiento muy sutil, señor abate, y bien lo demuestra. Sin embargo, yo me he dejado decir que la identificación de la bestia con Nerón se ha podido hacer de un modo casi seguro, porque la cifra 666 que San Juan atribuye al monstruo apocalíptico corresponde en caracteres hebraicos a la gráfica NERO CESAR. ¿Va usted a sostener que se da la misma coincidencia con la Democracia?

    -No sostendré eso, porque no estoy bastante familiarizado con el hebreo como para juzgarlo; pero lo que sé bien es que la gematría antigua, la ciencia abstrusa del lenguaje cifrado fundada sobre la idea de que las letras tienen un valor numérico en algunas lenguas, sobre todo en griego y en hebreo, esta gematría, a través de la cual hace usted una excursión tal vez temeraria, va a suministrar argumentos bastante curiosos a mi hipótesis.

    Ella enseña, en efecto, y usted lo sabrá seguramente, que 6 es un número imperfecto por excelencia, por oposición a 7, que señala una plenitud una perfección. Seis, escribe el Rvdo. P. Allo, “es un siete malogrado” (1), significa lo que se ha truncado, lo que está falto de un elemento esencial para realizar su plenitud y muestra una presunción ridícula para conseguirla, y esta significación aumenta cuando la cifra está repetida, como en este caso. Por eso San Alberto Magno y el Venerable Beda creyeron que simbolizaba la creación puramente material y el hombre sin religión. Con una interpretación aproximada, tiene uno el derecho de pensar que significa, sobre todo, la cantidad pura, la cantidad grosera e indefinida, sin ningún principio superior para organizarla y animarla, lo que es precisamente el dogma central de la Democracia.

    Continuemos con este análisis de las cifras, puesto que usted ha querido meterse en él. La Bestia es representada con siete cabezas, y esta multiplicidad para un solo cuerpo me parece también muy significativa del régimen popular, porque no olvidemos que siete es un número perfecto e indica, pues, ilimitación de los jefes posibles de la comunidad. Los diez cuernos y las diez diademas confirman esta interpretación, y parece que quieren hacernos comprender que el poder supremo es el atributo de la multitud, aunque este poder presente un aspecto ficticio e irrisorio, según la significación gemátrica, bastante desfavorable a la cifra diez. También se explica uno inmediatamente por qué los cuernos, es decir, la insignia del poder, llevan nombres de blasfemia, y por qué la boca no profiere más que ultrajes a la Divinidad. La Democracia revolucionaria, ¿no es intrínsecamente negación de la autoridad espiritual, y no lleva consigo ofensa permanente y guerra a Dios?

    Todas las otras alegorías secundarias me parece que encuentran una explicación tan fácil y tan clara. Mañana veremos cómo la Bestia revolucionaria, “la Bestia escarlata”, se ha curado de la herida, mortal en la apariencia, que le había producido el Papado, y, tan bien, que ha podido vencer la oposición de los espíritus más rectos y de los corazones más valientes, de los Santos, y ha asegurado su dominación durante el largo periodo simbolizado por cuarenta y dos meses. “Le ha sido dada autoridad sobre toda tribu, todo pueblo, toda lengua y toda nación, como lo hemos hoy día, y por el intermediario de la Bestia de la Tierra, que, a mi juicio, simboliza los gobiernos establecidos para ejercer efectivamente el poder y realizar las voluntades de la primera, recibe los homenajes del mundo entero, sobrecogido de admiración, que se prosterna ante el Dragón y que adora a la Bestia diciendo: “¿Quién hay semejante a la Bestia y quién puede combatir contra ella?”

    -Vamos a ver, francamente, ¿no evoca esto de modo irresistible, en usted, la insolente pretensión de las Democracias actuales a la dominación del universo? Y cuando el vidente de Patmos escribe que cada uno debe recibir una marca en la mano derecha o sobre la frente para que ninguno pueda comprar ni vender si no está señalado con el nombre de la Bestia o con el número de su nombre, ¿no le ha llamado a usted la atención el reciente recuerdo y el espectáculo actual (1951) de los esfuerzos prodigados por toda forma de Democracia, incluida la nuestra (francesa) para arrancar por engaños, por la fuerza o por vía jurídica, los derechos elementales de ciudadanos a todos los que se niegan a inclinarse ante la ideología satánica, hoy victoriosa?

    -Puede ser, digo levantándome. Existen ahí coincidencias bastante curiosas. Sin embargo, hasta que no esté mejor informado, yo no veo en su descripción y en sus ingeniosas comparaciones más que un juego habilidoso de su espíritu.

    -Si reflexiona usted sobre ello, tal vez encuentre algo más que eso, dice el señor Multi. Pero yo no he pensado en imponerle mi interpretación, por sugestiva que pueda parecerme, en una materia en que las opiniones permanecen perfectamente libres y en que es difícil hallar en hilo conductor. Por eso, después de haberle propuesto este perturbador asunto de meditaciones, volveré mañana a un terreno más positivo.

    Me despido; pero, apenas he cerrado la puerta, me sorprendo a mí mismo murmurando:

    -Y, sin embargo, el punto de vista del abate, bien merece alguna reflexión…

    (1) R. P. ALLO: Saint Jean, L’Apocalypse.

    -
    Última edición por ALACRAN; 11/08/2024 a las 11:41
    “España, evangelizadora de la mitad del orbe; España, martillo de herejes, luz de Trento, espada de Roma, cuna de San Ignacio...; ésa es nuestra grandeza y nuestra unidad: no tenemos otra. El día en que acabe de perderse, España volverá al cantonalismo de los reyes de Taifas.

    A este término vamos caminando: Todo lo malo, anárquico y desbocado de nuestro carácter se conserva ileso. No nos queda ni política nacional, ni ciencia, arte y literatura propias. Cuando nos ponemos a racionalistas lo hacemos sin originalidad, salvo en lo estrafalario y grotesco. Nuestros librepensadores son de la peor casta de impíos que se conoce, pues el español que deja de de ser católico es incapaz de creer en nada. De esta escuela utilitaria salen los aventureros políticos y salteadores literarios de la baja prensa, que, en España como en todas partes, es cenagal fétido y pestilente”. (Menéndez Pelayo)

Información de tema

Usuarios viendo este tema

Actualmente hay 1 usuarios viendo este tema. (0 miembros y 1 visitantes)

Temas similares

  1. La Prensa de Satanás
    Por Valmadian en el foro Política y Sociedad
    Respuestas: 0
    Último mensaje: 05/10/2016, 20:51
  2. Si a la guerra (contra Satanás)
    Por Valmadian en el foro Religión
    Respuestas: 1
    Último mensaje: 01/12/2015, 05:29
  3. Satanás en el ajuntamiento de pamplona
    Por Valmadian en el foro Noticias y Actualidad
    Respuestas: 28
    Último mensaje: 29/11/2015, 13:05
  4. El humo de Satanás
    Por Hyeronimus en el foro Crisis de la Iglesia
    Respuestas: 3
    Último mensaje: 25/06/2012, 14:30
  5. ¿Existe Satanás?
    Por FADRIQUE en el foro Religión
    Respuestas: 15
    Último mensaje: 20/08/2008, 20:41

Permisos de publicación

  • No puedes crear nuevos temas
  • No puedes responder temas
  • No puedes subir archivos adjuntos
  • No puedes editar tus mensajes
  •