Esta certificación parece un paso en la dirección correcta, aún así, no dejamos de oir hablar del auge del castellano en el mundo y sin embargo, otros idiomas teóricamente en vías de recesión (francés), consiguen atraer y matricular a muchísimas más personas cada año que nuestro idioma común.

El castellano puede ser un gran generador de riqueza y de expansión cultural para nuestro país, y claramente no se hace el esfuerzo suficiente.

Desconozco actulamente cuáles son las cifras, pero hace apenas un lustro, el dinero destinado por Francia para la promoción del francés en la ciudad de Nueva York, superaba el esfuerzo de España para la promoción del castellano en todo el mundo.