Tema: Atentado terrorista en Noruega

Erasmus, en mi modesta opinión el articulista "filosofo" J. F. se equivoca, pues si que resulta importante que el autor de las matanzas en Noruega sea un Masón, pro-sionista y anti nacional socialista.
Por supuesto que importa, y mucho.
Así mismo es vital recordar que no actuó solo...
Tambien importa saber quienes son los que están detrás.
Lo demás es una mediocre y refritada "filosofía" distractora...
Con esto no trato de "etiquetar", ni mucho menos "idiologisar".
Nada que ver con todo eso.

Para mí también es muy importante que sea MASÓN y SIONISTA, nuestros peores enemigos. Breivik es de la Sinagoga.
Dejo otro aporte (de la TFP-chilena):

Quién es el asesino en serie noruego


El asesino en serie noruego no es un “fundamentalista cristiano” sino un racista anticatólico y neo-pagano
Amenaza al Papa Benedicto XVI, a quien acusa de ser “un Papa que cobarde, incompetente, corrupto e ilegítimo”, ya que es responsable, así como los partidos de la derecha italiana, de “hacer un boicot a la lucha contra el Islam”.
La obsesión antimusulmana de Anders Behring Breivik, el autor de los atentados en Oslo y en la isla de Utoya, lo llevó a evocar una verdadera “Guerra civil europea” por medio de “ataques shock”, en los que uno de los objetivos sería el Papa.
Esta es la tesis del sociólogo Massimo Introvigne, especialista de las religiones y representante de la OSCE, quien la lucha contra el racismo y la discriminación contra los cristianos, después de analizar las motivaciones de Breivik, detallada en un documento titulado “2083 – Una declaración de independencia Europea”, firmado “Andrew berwick” y publicado en un sitio Web cifrado el 22 de julio, sólo unas horas después de la masacre.
Según Introvigne, la autenticidad del texto está confirmada por el hecho que contiene detalles sobre la vida privada familiar de Breivik y sobre la preparación del ataque, que sólo el terrorista podría haber conocido. Además, este texto “es coherente con otros escritos de los cuales Breivik es sin duda el autor”.
Es un texto de más de 1.500 páginas, en parte una antología de escritos de otros autores contra el Islam y la inmigración, como el bloguero noruego Fjordman, que es “el verdadero padre espiritual terrorista”, para quien, después de la Edad Media, el cristianismo –cuyos aspectos positivos serían de origen pagano– se convirtió en “una amenaza peor que el marxismo” para Europa.
El documento incluye elementos autobiográficos sobre Breivik, detalles minuciosos sobre las armas, las tácticas militares y de explosivos, y un alucinante diario sobre la preparación del atentado: “la parte más interesante, según Introvigne, es de naturaleza ideológica, ya que explica los motivos del ataque y las ideas de Breivik.”
En 2002, habría sido el cofundador en Londres de una orden neo-templaria, los Pobres Compañeros de Cristo del Templo de Salomón (PCCTS), inspirado en los grados templarios de la Masonería –una organización de la cual Breivik es miembro y que a elogiado su papel “esencial”– y abierto a todos los que reconocen la importancia de las raíces culturales cristianas, “pero también a los judíos y a las Luces”, como las raíces culturales “nórdicas y paganas”, por oponerse a los verdaderos enemigos, que son el Islam y la inmigración.
Según Massimo Introvigne, “lejos de ser un cristiano fundamentalista, Breivik, bautizado en la Iglesia Luterana de Noruega, se define como ‘cristiano cultural’, en la que la referencia a la herencia cristiana tiene sólo una función instrumental anti-islámica”, porque según él, las iglesias no están preparadas para la lucha contra el Islam. En consecuencia, propone un gran Congreso Europeo de cristianos a partir del cual puedan hacer una nueva iglesia europea y antiislámica. Breivik ataca directamente a Benedicto XVI por haber “abandonado el cristianismo y a los cristianos europeos y que debe ser considerado como un Papa cobarde, incompetente, corrupto e ilegítimo”.
“La guerra civil europea” de los “justicieros templarios” de Breivik deberían seguir tres fases, según Introvigne: en primer lugar “ataques shock realizados por células clandestinas”, cuyos blancos serían los partidos políticos: sobre todo los laboristas noruegos, pero también los partidos de la centro–derecha italiana, como el de Berlusconi (PDL), o aún el PD, el IDV y el CDU, acusados de frustrar la guerra contra el Islam.
Breivik subrayó que no es un nazi (“Si hay una figura que detesto, es Adolf Hitler”, dijo) porque su ideología político– religiosa es pro-semita y pro-Israel y sueña con una gran alianza entre los pueblos nórdicos y los judíos para luchar contra el enemigo con el que está obsesionado, el Islam.
“Queda por verse, dijo Introvigne, si Breivik delira o tiene razón cuando dice que su orden neo-templaria no se reduce a él sólo, sino que también reagrupa a otras personas (que, de acuerdo con el documento, han sido entrenados en África y en otros lugares por criminales de guerra serbios, que el terrorista considera como héroes).”. “Si fueran ciertas las amenazas, se deberían tomar muy en serio las que realizó contra el Papa y contra Italia.”
Fuente: Il Secolo XIX
29 jul 2011 | por Acción Familia | Tema: General

Error: lo puse dos veces.

Ya se que el personaje no les gusta, pero vean el video. Da datos sobre como fue acogido el atentado en Israel, sobre sus intereses, y frases sobre el "manifiesto" de este tipo que no dejan dudas.

Convincente el video. Resume lo que veníamos diciendo: el enemigo es el sionismo.

Iniciado por juan vergara

Erasmus, en mi modesta opinión el articulista "filosofo" J. F. se equivoca, pues si que resulta importante que el autor de las matanzas en Noruega sea un Masón, pro-sionista y anti nacional socialista.
Por supuesto que importa, y mucho.
Así mismo es vital recordar que no actuó solo...

Resultaría importante si forma parte de algún complot o es un "perejil", pero por lo visto es un freaki:

Breivik and Templar Myths

New health warning on Templar myths


Our Dan Brown-tinged era has put a kind of “full-employment act” in place for spinners of Templar myths. Some of these entrepreneurs cater to the desire for escapism and fantasy (which, given the state of the world at the moment, is perhaps understandable). Much of it is less benign, from the dozens of murders and suicides connected with the so-called Order of the Solar Temple in the 1990s, to the ruthless Caballeros Templarios drug gang in Mexico that split off from the equally fearsome La Familia cartel. The latter has produced a 22-page “Templar code” for its criminal members, including a pledge not to use or sell narcotics on Mexican territory. How chivalrous.
What is it about the Templar myth that seems to beguile both the general public as well as those who are unhinged or engaged in nefarious activities? With the horrific bombing and shootings in Norway on July 22nd, that question has taken on greater urgency — though the world’s media are having difficulty making sense of it.
Perhaps you’ve seen the photos above and below: confessed murderer Anders Behring Breivik in his self-designed “Templar” military uniform, with the flair of a third-world generalissimo (NB the uniform appears to be based on that of the US Marine Corps); and in full evening dress as a Master Mason of the Norwegian Order of Freemasons. The curiosities in these pictures include an Idi Amin-like jumble of self-awarded medals on the former, and the odd presence of a pen in his breast pocket on the latter — sort of like an old-fashioned primary schoolmaster. Perhaps one commentator is right: the man has above-average intelligence but below-average sanity, his mind awash with a hodge-podge of influences.
Admittedly, it’s not easy to make sense of Breivik: a bogus Templar; until recently a genuine Freemason (he was expelled immediately following his capture); a member of the Church of Norway who advocated reunion with Rome; an agnostic (as he himself has written); a self-proclaimed defender of European civilization against Islamism; a child of privilege who proudly states (accurately or not) that he was the most notable hip-hopper and graffiti artist of his teenage generation in Oslo… Not to mention his rambling blogs about the threat of pollution from venereal disease (rather Dr. Strangelovian?), combined with his stated plan to treat himself to the ministrations of a prostitute prior to his attack. The reputable Atlantic has written “Whatever the case, he may be the only Freemason, Rome-leaning, Protestant fundamentalist in the world.” That not entirely correct statement shows how far we still have to go in coming to grips with all this.

Sin dudas, como he dicho, él es un loco, pero aún así sirve al Sionismo. Fue un francmasón.

Masacre de Oslo: Breivik fue condenado a 21 años de prisión
La Justicia noruega consideró al extremista responsable del ataque en el que murieron 77 personas. Escuchó el veredicto con una sonrisa.

GESTO A LOS JUECES. Breivik hizo un saludo neonazi cuando ingresó al tribunal.

OSLO, Noruega.- El ultraderechista Anders Behring Breivik, de 33 años, fue considerado por unanimidad responsable de sus actos y condenado hoy a 21 años de cárcel prorrogables, la pena máxima, por la masacre en la que mató a 77 personas en Noruega, en julio de 2011. La sentencia podrá ser prolongada de forma indefinida mientras que el condenado sea considerado peligroso.

El acusado, vestido con traje negro, camisa blanca y corbata gris oscuro, hizo su saludo neonazi al entrar al tribunal de Oslo. Luego escuchó con una sonrisa el veredicto pronunciado por la juez Wenche Elizabeth Arntzen. "El fallo es unánime", declaró.

Breivik mató a 77 personas el 22 de julio de 2011; con una bomba acabó con la vida de ocho de ellas en el barrio gubernamental de Oslo y 69 más fallecieron luego en un tiroteo en la isla de Utoya, la mayor parte de ellos, eran jóvenes del partido laborista que participaban en un campamento.

El acusado reconoció ser el autor de los homicidios, pero se declaró inocente: dice haber perpetrado actos "atroces pero necesarios para salvar de Noruega del multiculturalismo". Quería ser reconocido mentalmente sano para legitimar su ideología racista y xenófoba. (AFP)

NOTA

Como les gustan a los periodistas esas palabritas: "neonazi", "ultraderechista", "ideología racista y xenófoba"