Se empieza creando mezquitas en plazas de toros, se continúa mandando a cortar cuellos a los del locutorio de la esquina, y de ahí en adelante ...
Un ejemplo sutil, aparentemente sin importancia, pero que la tiene y mucha es el problema de todos los años cuando llega el verano donde llega el grajo de turno que quiere bañarse completamente vestida en la piscina, el socorrista dice que no, el director del centro dice que tampoco, luego llega una gafapasta que les llama a los dos fachas y xenófobos y permite el baño despreciando cualquier norma de higiene.
La última vez recuerdo que empezaron a exigir un horario acotado para ellos, para no tener que ver las carnes occidentales,..., me da vergüenza de nuestra debilidad, es desesperante.
Marcadores