C. L. A. M. O. R.: ¿Saavedra tradicionalista?
¿Saavedra tradicionalista?




El comerciante altoperuano Cornelio Saavedra se convirtió, tras las Invasiones Inglesas, en el comandante de los Patricios, el cuerpo militar compuesto exclusivamente por criollos. Pero, desde ese momento, se convirtió también en actor político de renombre, como conspirador nato que era. Sin él, la Revolución de Mayo de 1810 no hubiese tenido éxito, del mismo modo que fue él quien frustró la de 1809 para deponer a Liniers.


Hábil calculador, en esta ocasión estaba convencido de que las brevas ya estaban maduras (según expresión que solía usar con sus complotados), y se puso al frente de la Revolución.


Como comerciante de buena posición que tenía mucho que ganar con el cambio de autoridades (rompiendo así con el monopolio que beneficiaba fundamentalmente a los comerciantes peninsulares -y a las pequeñas industrias locales), pero que podía también perder bastante si estallaba la anarquía jacobina (que pudiese hacer peligrar los buenos negocios con las importaciones inglesas), lo suyo fue el conservadurismo. El saavedrismo representó así la versión porteña del girondismo revolucionario francés.


Pero hete aquí que para la historiografía revisionista nacionalista, Saavedra se ha convertido en uno de los próceres máximos de la patria (esa "patria" pequeña conseguida con la independencia revolucionaria a costas de la gran "patria", las Españas, donde nunca se ponía el sol). Es más, algún autor contemporáneo oriundo de Cuyo, llega a decir que Saavedra era tradicionalista. Así, como lo lee.


Como puede confirmarse con algunos de los textos que aquí en esta bitácora se enlazan en el margen derecho bajo el título "Leyenda rosa nacionalista", los autores nacionalistas o revisionistas suelen despreciar la Memoria Autógrafa de Saavedra. Texto que ya de por sí da con tierra con unos cuantos mitos historiográficos del nacionalismo. Pero, dicen ellos, la Memoria es un texto de un Saavedra ya anciano, donde los recuerdos no son claros (¡sólo habían pasado 19 años!) y donde existe la intencionalidad de no privar a sus hijos de los "beneficios" de la Revolución (pensiones y privilegios... ¡ay de las revoluciones igualitarias!).


Pues bien, vamos, entonces, a traer un texto de Saavedra bien contemporáneo a los hechos: el voto particular de este traficante devenido jefe militar en el Cabildo abierto del 22 de mayo de 1810. Anotó allí de su puño y letra:

Y que no quede duda de que el Pueblo es el que confiere la autoridad, o mando.
¡Qué tradicionalista! Un tradicionalista defensor de la teoría de Juan Jacobo Rousseau de la soberanía del pueblo.


(Por no hablar de los que pretenden falsear la historia convirtiendo a esta proclama revolucionaria en un silogismo suareciano... demostrando no haber leído jamás a Francisco Suárez.)


Cornelio Saavedra, el Bonaparte del Río de la Plata,
sólo que sin la genialidad militar del Gran Corso,
ni la posibilidad de implementar su plan para coronarse Rey.






el 10/06/2011