Mis "40 principales" particular.
Con tanto discutir sobre el "heavymetal satánico al 95% y no satánico al 5% restante", se me ha abierto la apetencia sobre la música preferida de cada uno. Entiendo que no se trata del tópico de "a mi me gusta la...", sino de estilos, título, autores, etapa, etc., concretos.
Como tampoco voy a aburrir a nadie redactando 40 títulos, y creo que hasta me costaría llenarlos, citaré tan sólo los primeros que son perpetuos en mi lista favorita:
1º El "Ave María" de Hendel, en cualquier versión que se quiera, no hay nada que la iguale.
2º El "Oriamendi"
3º El "Gernikako Arbola" de Iparraguirre.
4º...40º grupos y solistas como "Il Divo", "Burt Buccara", "Rod Stewart" , "El Dúo Dinámico", "José Luis Perales", "Nat King Cole", "The Platters"...
Composiciones que me parecen sublimes son, por ejemplo, "La mort d'Ophélie". Ballade en la ópera Tristia de Berlioz; o "El adiós a la vida" de Puccini. En realidad son tantas que mi lista rebasaría las "400" seguramente.
"He ahí la tragedia. Europa hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma europea choca con una realidad artificial anticristiana. El europeo se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.
<<He ahí la tragedia. España hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma española choca con una realidad artificial anticristiana. El español se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.>>
Hemos superado el racionalismo, frío y estéril, por el tormentoso irracionalismo y han caído por tierra los tres grandes dogmas de un insobornable europeísmo: las eternas verdades del cristianismo, los valores morales del humanismo y la potencialidad histórica de la cultura europea, es decir, de la cultura, pues hoy por hoy no existe más cultura que la nuestra.
Ante tamaña destrucción quedan libres las fuerzas irracionales del instinto y del bruto deseo. El terreno está preparado para que germinen los misticismos comunitarios, los colectivismos de cualquier signo, irrefrenable tentación para el desilusionado europeo."
En la hora crepuscular de Europa José Mª Alejandro, S.J. Colec. "Historia y Filosofía de la Ciencia". ESPASA CALPE, Madrid 1958, pág., 47
Nada sin Dios
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