"-Hola... le llamo simplemente para decirle que usted es un facha hijo de puta... y que si pudiera le metía una bala en su puto cráneo" (transcripción literal de uno de los mensajes del contestador de este empresario, emitido durante una entrevista telefónica a éste en el programa La tarde con Cristina, en la cadena COPE, hace unos días).
Quizá, no lo sabemos, la iniciativa de este señor, al romper relaciones con una zorra de proveedor, fue torpe, pero en todo caso legal, y respetable. El haberlo hecho por escrito y explicando puntualmente sus motivos fue algo honrado... e imprudente: pues la carta fue enviada, criminalmente, por la zorra en cuestión a un medio escrito, El Periódico de Cataluña, el cual, criminalmente, la publicó con la única y precisa intención de que la HEZ de la sociedad efectuara este tipo de acciones criminales, cuantas más mejor, contra el empresario.
La decisión concreta de este empresario, habrá escocido sólo a quellos catalanes que, tal vez demasiado susceptibles, se sienten ofendidos en su "orgullo comunitario", por el ridículo, por el mínimo hecho de que un empresario privado vallisoletano acabe con su relación comercial con un proveedor privado catalán, y lo haga dando la cara y por escrito.
La publicación de la carta habrá sumido en la más negra vergüenza a aquellos lectores habituales del Periódico de Cataluña con un mínimo de dignidad.
En fin, la publicación de la carta, lejos de escocer, habrá alegrado, ¡lo mismito que una bestial cogorza!, a la mencionada HEZ de la sociedad.
Por último, la zorra que envió la carta al Periódico, ni se alegró ni se escoció ni, por supuesto, se avergonzó. La zorra que envió la carta al Periódico, sencillamente, se quedó igual de zorra. El hecho de que enviara la carta al Periódico, a mí, personalmente, me deja bien claro que Don Serafín tenía razón (en dejar de trabajar con la zorra, no en -¡infeliz buenazo! -hacerlo dando la cara y por escrito, ¡como si la destinataria fuese una 'persona' y no una sucia y traicionera zorra!
Si es que los hay de un cándido...)
Un saludo.
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