Re: ¡EL CORONEL ALAMÁN SOMOS TODOS (¿Independencia de Cataluña? Por encima de mi cadá

Iniciado por
juan vergara
Se agradece la aclaración Valmadian.
No hay de qué, pero la cuestión es muy compleja y se enmarca dentro de otro problema mayor como es la crisis económica que afecta a España (de la moral ni hablemos), la cual, a su vez, forma parte de la crisis de la zona euro. Hay un aspecto estructural muy preocupante en nuestra economía. Se trata de la dimensión "microeconómica", la del día a día, la de la gente de la calle. Y es que pese a usar el euro como moneda de cambio y pagos, esa economía lo es realmente de la peseta. Es decir, nuestros sueldos están en función de la anterior moneda. Así, cuando se implantó el euro, éste se hizo al cambio de 166'386 pesetas y hoy tengo entendido que estaría alrededor de 230 pesetas. O sea, en estos 10 años de euro se ha producido una evidente inflación, pero los sueldos son los mismos o más bajos que hace esos 10 años. La consecuencia es obvia: un empobrecimiento galopante porque España es un país de pequeños empresarios y pequeños empleados. En consecuencia pasa lo de siempre, pagan unos por otros y mientras esto no se resuelva, no vamos a levantar cabeza y, por el contrario, todo se irá radicalizando cada vez más.
En los últimos años de Franco, éste solía decir siempre una misma frase: "Todo está atado y bien atado". Mucho se ha especulado sobre esta frase un tanto críptica, siendo que en numerosas ocasiones se ha atribuido su significado a su sucesor, al sistema democrático que Franco llegó a intuir, y otras muchas interpretaciones. Personalmente me inclino por la idea de que se refería a una realidad sociológica de España. Cuando se produjo el golpe de Estado republicano en 1931, este era un país con una casta dirigente formada por una aristocracia aliada a una alta burguesía muy bien representada por la catalana; con una clase media formada por militares, curas, funcionarios, profesionales libres, comerciantes, artesanos, etc., pero más bien de reducidas dimensiones; y por último, una clase obrera y campesina muy amplia y extendida con un alto grado de pobreza y analfabetismo.
Cuando en 1975 fallece Franco, España tenía un sistema educativo obligatorio para todos, la Seguridad Social llegaba a todas las capas, la gente era dueña de su casa y tenía coche, había vacaciones pagadas, "el hijo del obrero y del campesino" podía ir a la universidad, muchos privilegios habían ido desapareciendo lentamente..., y la sociedad se fue igualando por el centro: en mi opinión, el "atado y bien atado" se refería a que España se había convertido en un país estable gracias a que se había generado una amplísima clase media razonablemente acomodada. Y los países cuya base sociológica es la clase media son los países más estables.
Años después, y hasta la llegada de la crisis, España era el "Estado del bienestar", así lo han definido muchas veces. Pero ahora estamos al borde de que todo eso se rompa. Si, además, añadimos una Constitución disparatada con el tema de las autonomías, esto empieza a sonar a aquello de "el barco se hunde, sálvese quien pueda", al menos, esa parece ser la consigna y la política del independentismo más paleto de Occidente.
"He ahí la tragedia. Europa hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma europea choca con una realidad artificial anticristiana. El europeo se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.
<<He ahí la tragedia. España hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma española choca con una realidad artificial anticristiana. El español se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.>>
Hemos superado el racionalismo, frío y estéril, por el tormentoso irracionalismo y han caído por tierra los tres grandes dogmas de un insobornable europeísmo: las eternas verdades del cristianismo, los valores morales del humanismo y la potencialidad histórica de la cultura europea, es decir, de la cultura, pues hoy por hoy no existe más cultura que la nuestra.
Ante tamaña destrucción quedan libres las fuerzas irracionales del instinto y del bruto deseo. El terreno está preparado para que germinen los misticismos comunitarios, los colectivismos de cualquier signo, irrefrenable tentación para el desilusionado europeo."
En la hora crepuscular de Europa José Mª Alejandro, S.J. Colec. "Historia y Filosofía de la Ciencia". ESPASA CALPE, Madrid 1958, pág., 47
Nada sin Dios
Marcadores