Una vez más muchos carlistas nos unimos a la concentración para protestar contra la rendición del Estado ante el terrorismo separatista, y para señalar que no aceptaremos la destrucción de lo que queda de España. Un gran mástil con una bandera roja y gualda con el Sagrado Corazón de Jesús entronizado y una bandera de la Cruz de Borgoña se situaba en medio de la explanada de Colón, y en torno a ella se arremolinaba el grupo más numeroso de carlistas. Por todo el perímetro de la concentración (Paseo de la Castellana, Calle Génova, Goya, etc.) habia otros grupos de carlistas, muchos de los cuales también portaban banderas de España y de la Tradición. En nuestro grupo también se podían ver muchas banderas de Navarra, laureadas, portadas por correligionarios navarros que viven en Madrid o habían venido del Viejo Reyno. Nuestra presencia recibió entrañables muestras de simpatía.
La AVT realizó un gran esfuerzo de movilización en apenas tres días, congregando a más de 200.000 personas. Los ánimos de los manifestantes estaban claramente caldeados contra el gobierno y contra el PP, recibiendo los pocos
peperos que se hicieron presentes la merecida reprimenda. Nuestro grupo fue de los más combativos en los cánticos contra la rendición del Estado y contra Europa. En el estrado los oradores "oficiales" realizaron también críticas al gobierno, aunque no lo suficientemente tajantes. Fueron las víctimas del terrorismo presentes, que se contaban en más de veinte, quienes con mayor claridad hablaron, recibiendo tremendas ovaciones de los concentrados. También estaban en el estrado oficial las madres de Sandra Palo y de una de las niñas de Alcácer, horrorizadas ante la posibilidad de que esta decisión política se extienda a los peores crímenes imaginables.
Entre las víctimas que tomaron la palabra nos pareció especialmente significativa la intervención de Maite Araluce Letamendía, hija del que fuera
requeté en nuestra Cruzada y presidente de la Diputación de Guipúzcoa, Juan María Araluce: "No albergamos ningún odio para los que impidieron que mi padre viese cómo me licenciaba, los que impidieron que me acompañase al altar el día de mi boda, los que impidieron que conociese a sus nietos... Sólo exigimos justicia".
Agencia FARO
Marcadores