La enseñanza en Asturias nunca ha estado peor. Si hace unos días denunciábamos el nuevo cierre de colegios rurales, hoy toca defender la maltratada formación profesional.

Las Juventudes Tradicionalistas Asturianas expresan su apoyo a los estudiantes de Formación Profesional de la Universidad Laboral que, en una nueva tropelía del Gobierno autónomo y del Ayuntamiento de Gijón, ambos en manos del Frente Popular o "izquierda plural", están a punto de ser desalojados de sus instalaciones para entregárselas a la multinacional Thyssen Krupp.

La Universidad Laboral de Gijón ha sido víctima primero de una malevolencia extraña que prefería su ruina, y ahora de los delirios y caprichos de los parásitos de la política que, encabezados por Vicente Álvarez Areces, manejan Asturias. Lo que queda del antiguo centro de estudios ha sido especialmente maltratado. Desde el abandono de los jesuitas y el desalojo de las madres clarisas, todo ha sido derrochar dinero público y marginar la enseñanza profesional.

Denunciamos asimismo la hipocresía de Izquierda Unida, que forma parte de la coalición gobernante en el Principado y en Gijón, y que finge oponerse a un atropello que podría fácilmente detener si quisiese. Pero sus poltronas y su sectarismo pueden más. Denunciamos también la aparición oportunista y aprovechada del llamado "Sindicato de Estudiantes", también del entorno de IU, del que no consta que haya ningún estudiante entre sus miembros.

Enero 2007.


Juventudes Tradicionalistas Asturianas
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