Mire, Edmundo, Cristo es Rey y por tanto debe figurar en los edificios públicos (y con más razón que otros que yo me sé). Y no molesta a nadie. Solo molesta a quien lo odia (no digo que usted lo odie, simplemente repite como un loro consignas muy repetidas). No olvide que la mayoría de los españoles somos católicos, aunque la mayoría hoy en día sean católicos muy comprometidos y muchos solo lo sean nominalmente. Ya ve. El profe retira el crucifijo cada mañana, y los alumnos se quejan al director. El director y el claustro de profesores les dan la razón a los alumnos, aunque el ministerio todavía no ha dicho la última palabra. ¡Bravo por los italianos!