Europeas 2014. Notas | INFOKRISIS, el blog de Ernest Milà

nfokrisis.- Por mucho que los partidos hasta ahora mayoritarios lo quieran negar, lo que ha ocurrido en las elecciones del 25 de mayo de 2014 ha sido un vuelco electoral que tendrá importantes repercusiones en los próximos años y cuyo alcance no termina en unas meras elecciones que, históricamente, han ilusionado poco al electorado. A la vista de los resultados y de la distribución de escaños podemos extraer algunas conclusiones de urgencia y poner en orden nuestras ideas destacando los siguientes puntos:La decadencia de los partidos mayoritariosEn toda Europa, los partidos que han dirigido la vida política continental en las últimas décadas parecen haber entrado en crisis. Otro tanto ha ocurrido también en España en donde el PP ha pasado de 24 diputados a 16 y el PSOE de 23 a 14 diputados, pero cuando se examinan y comparan las cifras en bruto se percibe hasta qué punto se puede afirmar que el bipartidismo ha muerto en España: en efecto, en 2014, la suma de los votos del PP y del PSOE ha sido de 7.650.000 votos, mientras que cinco años antes estas dos siglas agrupaban 12.800.000 votos. En número de diputados la merma entre los objetivos por PP-PSOE en 2009 (47 eurodiputados) y los obtenidos ahora (30 diputados) es de 17 diputados que se han repartido entre otras formaciones políticas.De 6 a 10 partidos representadosEs cierto que los dos grandes partidos siguen siendo grandes y que el PP y el PSOE conservan una importante cuota de poder, de votos y de diputados. Pero ni el PSOE ha soportado la erosión del período de gobierno de Zapatero, ni los errores y ambigüedades constantes de su rama catalana, ni la falta de liderazgo, ni la obsesión feminista de la candidatura encabezada por Helena Valenciano que sustituyó la campaña y la difusión de un programa por el comentario machista de Arias Cañeta. La Valenciano irá a Strasburgo y desde allí, como hizo aquí durante el zapaterismo, para defender los derechos de los inmigrantes a llegar en oleadas a Europa y regularizarse por imposición de su mera presencia. Arias Cañete se preocupará de defender lo que, sobre todo, interesa a su patrón, la compañía Monsanto: lograr que las semillas obtenidas mediante ingeniería genética se impongan sin restricciones en la UE. Pero lo cierto es que unos y otros han sufrido el mayor varapalo de la democracia, un castigo sin precedentes y del que muy difícil lograrán recuperarse. El número de partidos representados pasará de 6 a 10 y, salvo UPyD y C’s (considerados y autotitulados como “de centro-izquierda”), el resto de partidos que enviarán representantes a Strasburgo son “de izquierdas”. La bancada española queda pues, multifraccionada.“Surpasso” en CataluñaEn Cataluña se ha votado más que en 2009 (1.984.000 en 2009, frente a los 2.532.000 que lo han hecho ahora. Esto es 550.000 votos más. Vale la pena ver hacia dónde han ido estos votos. En primer lugar, el PSC ha perdido ¡más de la mitad de sus votos! Obteniendo 358.000 en donde antes tenía 708.000, siendo la candidatura más votada. Este fracaso es excepcionalmente importante porque el PSOE jamás obtendrá mayoría absoluta en el Estado, si no cuenta con una organización fuerte y hegemónica en Cataluña y en Andalucía. Y por lo que se refiere a la organización del PSC catalán, puede decirse que está disgregándose por momentos debido a su torpe y ecléctica política en el tema de la vertebración del Estado. Pero el otro síntoma de que en Cataluña el bipartidismo está ya hoy muerto es que CiU, aun habiendo aumentado algo sus votos, ha sido superado, rebasado y humillado por ERC que ha pasado de 181.000 a 594.000 votos… ahí tenemos a dónde han ido la mayoría de votantes nuevos que se habían abstenido en Cataluña en las anteriores elecciones. ERC ha sabido movilizar el voto abstencionista en la medida en que se presenta como una alternativa a la “banda de los cuatro” en Cataluña: si el bipartidismo catalán estaba constituido por CiU de un lado y el PSC de otro, ahora éste último ha desaparecido prácticamente, sustituido por ERC. En cuanto al PP catalán también ha retrocedido convirtiéndose en insignificante. Parte de los votos perdidos por el PSC han ido a parar a C’s (sexta fuerza política en aquella comunidad) y a UPyD que ha duplicado sus votos en esa comunidad. Lo que indica estos resultados en Cataluña es que CiU no se ha beneficiado en absoluto del soberanismo que ha generado, sino que eso ha servido para allanar el camino a ERC.Resultados deslegitimados por una alta abstenciónNo solamente en España, sino en toda Europa, el abstencionismo ha sido superior al 50% de los votos. Es cierto que a efectos legales el hecho de que más de la mitad del electorado europeo haya vuelto la espalda a las urnas, no tiene ninguna importancia, pero también es cierto que legítimamente estos altos índices de abstención restan legitimación a los diputados que se sientan que apenas representan a sectores minoritarios del electorado.El Ministerio del Interior temía que se produjera una abstención todavía mayor y ha hecho todo lo posible por presentar el leve aumento de la participación electoral (debido solamente a la mayor participación en las zonas en las que la presión independentista ha sido mayor) como un gran avance. En realidad, la participación electoral ha bajado en parte de las comunidades autónomas llegándose a cifras récord en Europa: en Canarias entre votos nulos, en blanco y abstención, apenas ha votado el 33,5%, en Baleares lo ha hecho el 32,5%, en Ceuta el 21,40% y en Melilla el 23%... En estas comunidades han aumentado los votos en blanco, nulos y los índices de abstención en relación a las mismas elecciones de 2009.Encuesta del CIS encuesta-fraudeHabitualmente, al producirse el recuento de votos se suele olvidar lo que las encuestas previas han previsto en sus sondeos. En particular, por los medios a su alcance y por el carácter institucional, la encuesta del CIS merece ser tenida en cuenta y recordada. Así mismo, se trata de la encuesta que se realiza con una mayor muestra de población y, por tanto, se supone que debería ser la más rigurosa. Pero el “paso por la cocina” de los resultados, hace que siempre existan desfases. En esta ocasión han sido notables: la encuesta del CIS atribuía al PP 20-21 diputados (cuando ha obtenido 16…) y al PSOE 18-19 diputados (cuando se ha quedado con 14). El diputado que atribuían a Podemos se ha convertido en 5 y así sucesivamente… Era evidente que, tras pasar por la “cocina” del CIS, la encuesta fue enmascarada y maquillada para tratar de dar la sensación de que los resultados de los dos grandes partidos serían muy similares a los obtenidos en 2009, con ligeras pérdidas, naturales por el ejercicio del poder en el caso del PP y algo más acusadas en el caso del PSOE a la vista del bajo perfil de su candidatura. Ahora vale la pena preguntarse por qué la que debería ser la encuesta más rigurosa, la realizada con más medios y la que cuesta más dinero a los españoles, es una simple y completa chapuza.El avance de la “izquierda alternativa”Las distintas formaciones de izquierda “altereuropeísta” (esto es, partidarias de la construcción de Europa, pero no de una Europa neoliberal como la que es hoy la UE) han realizado un avance que puede ser calificado como el resultado del hundimiento del PSOE y de la llegada de casi un millón de nuevos votantes jóvenes. La Izquierda Plural ha avanzado, pero muy poco si tenemos en cuenta que tras esa sigla que ocultan fragmentos muy diversos procedentes del antiguo PCE, de grupos ecologistas de izquierda y de “colectivos sociales” vinculados a IU (han pasado de 588.000 votos a 1.500.000, ganando algo menos de 1.000.000 de votos, lo que no es poco). Sin embargo, quien ha resultado el auténtico vencedor de este sector es Podemos que ha obtenido solamente un diputado menos que la Izquierda Plural, agrupando de la noche a la mañana, 1.245.000 votos. Si tenemos en cuenta que las diferencias entre estas dos formaciones no son excesivas, podemos pensar lo que hubiera supuesto el que juntas se situaran al mismo nivel que el PSOE (3.600.000 frente a los 2.800.000 obtenidos por Podemos). Cuando hace dos años preveíamos la posibilidad de que el PSOE se derrumbara y surgiera del movimiento del 15-M un movimiento que lo sustituyera, no andábamos muy lejos de lo que ha ocurrido y que se hubiera confirmado si las formaciones de la “izquierda alternativa” hubieran ido juntas.El contraste entre España y EuropaEn Francia ha vencido, simplemente, el Front National. Allí el PS se ha convertido en una fuerza residual. En el Reino Unido, conservadores y laboristas han quedado sepultados bajo el rodillo del UKIP. Por citar solamente unos ejemplos… En España, en cambio, los grupos políticos que podrían ser considerados como paralelos o “hermanos” de estos grupos, o no se han presentado o han obtenido unos resultados insignificantes, o simplemente, han realizado un discreto tránsito (como Vox). España, en esto, es completamente diferente al resto de Europa. Todo sigue igual “a la derecha” y todavía la consigna de Manuel Fraga, “sin enemigos a mi derecha”, sigue siendo un dogma del sistema. Incluso en los medios de comunicación de la derecha podrá aparecer un Pablo Iglesias, pero nunca un candidato euroescéptico con posibilidades de ir más allá del discurso antiabortista… Si en ese ambiente quedan mimbres suficientes como para ser conscientes del inmenso espacio político que existe a la derecha de la derecha liberal (como se ha demostrado en toda Europa) en el próximo año deberán de darse las iniciativas tendentes a que esta sea la última vez que España es la excepción europea.La situación global en EuropaHa ganado la derecha liberal en toda Europa, pero perdiendo votos. Varias formaciones de extrema-derecha han logrado introducirse y, en esta ocasión, no deberá haber grandes problemas en constituir un Grupo Parlamentario propio (a pesar de que lo más posible es que se reconstruya el antiguo grupo Identidad, Tradición, Soberanía, mientras que Europa de la Libertad y la Democracia se vea notablemente reforzada). Por primera vez el NPD ha obtenido un escaño y si tenemos en cuenta las dificultades y los impedimentos legales y psicológicos que siempre se han cernido sobre esta formación, se verá que este resultado tiene aún más mérito. Hará falta ahora ver como todas estas fuerzas aprovechan su avance en las elecciones europeas para mejorar su posición en los parlamentos nacionales y en las administraciones locales. Lo que sí parece certificado es que tanto en España como en Europa, puede afirmarse que las fuerzas que defienden el statu-quo actual y el reparto de poder en centro-derecha y centro-izquierda que se viene registrando desde hace décadas, se han visto debilitadas casi sin excepción, mientras que los partidos que suponen el ascenso de fuerzas nuevas, más o menos euroescépticos, han mejorado sus posiciones. Unos retroceden, los otros avanzan… Avanza la anti-UE, retrocede el stablishment pro-UE.© Ernesto Milá – infokrisis – ernesto.mila.rodri@gmail.com – Prohibida la reproducción de este texto sin indicar origen


Más sobre el 25-M | INFOKRISIS, el blog de Ernest Milà

Una cosa son los análisis de urgencia y otra el hacer un examen más reposado sobre los resultados electorales. Lo primero ya está hecho, vamos ahora a examinar algunos aspectos menos estridentes (pero, sin duda más importantes) de estos comicios. Hoy (martes) tenemos ya la ventaja de que todos los partidos han tenido ocasión de realizar una valoración de los resultados y conocemos su opinión. Lo dicho aquí no es más que un añadido a las primeras valoraciones realizadas en anteriores artículos publicados en la noche misma en la que se conocieron los resultados.El PP que no ha entendido la advertencia del electoradoEl problema es que el PP cree, sinceramente, que solamente ha perdido algunos votos pero que ha “ganado” las elecciones simplemente por el hecho de que ha obtenido más votos que su inmediato rival, el PP. Por tanto, ni Rajoy considera necesario remodelar el gobierno, ni siquiera rectificar algunas de las políticas que más han irritado al electorado. Simplemente, siguen considerándose vencedores y están mucho más tranquilos de lo que aconsejaría el sentido común.A día de hoy, Rajoy ya no puede eludir algo que ha conseguido esquivar durante dos años: afrontar de una vez por todas el “problema catalán”, especialmente porque los resultados en aquella comunidad indican que el PP retrocede y se convierte en una fuerza insignificante al lado de una ERC sobredimensionada pero que, en cualquier caso, ha realizado el “surpaso” quedando por delante de CiU. Hubiera sido mucho más lógico que Rajoy afrontara el problema una vez se suscitó y lo hiciera radicalmente siendo claro ante las aspiraciones independentistas. En lugar de eso, no dio su “enterado” al desafío soberanista y este siguió creciendo confiando en que, a fin de cuentas, el referéndum estaba al alcance de la mano y, a partir de ahí, el problema no hizo más que crecer. El resultado del domingo demuestra que en Cataluña quienes han acudido a votar han sido los nacionalistas y los independentistas… no los españolistas ni las fuerzas de la derecha españolista que han optado por quedarse en casa a la vista del escaso crédito que conceden al PP y a las dimensiones de C’s, todavía minúsculas.Aparte de esto, la dirección del PP no ha entendido el aviso del electorado: así no se puede seguir gobernando, de espaldas a la población poniéndonos la pistola en la nuca para vaciarnos la cartera y entregar el efectivo obtenido en la rapiña a los carroñeros del Banco Central Europeo y del Bundesbank. No se puede seguir gobernando ignorando que para toda la población la corrupción, la crisis económica, el paro y la inmigración masiva siguen siendo los principales problemas, junto a la merca del Estado del Bienestar y de los derechos sociales. El PP no se ha enterado de que el bipartidismo ha muerto (en realidad en otros países ha pasado algo similar: ni la derecha liberal francesa, ni el socialismo, han comprendido tampoco que ya no son hegemónicos, especialmente el PS que ha pasado a ser la tercera fuerza política, a distancia de la primera, el Front National) y que ellos ya no son la solución, ni nunca lo han sido, sino el problema (¡y qué problema!).El PSOE empieza a tomar conciencia de las dimensiones de su crisisSi Rubalcaba ha terminado dimitiendo tras conocer los resultados electorales, se ha debido, no tanto a los resultados del PSOE (malos) como a los del PSC (mucho peores). El PSC ha perdido más de la mitad de sus votos, pago inevitable a su eclecticismo en materia de vertebración del Estado. Y eso es muy importante para el PSOE porque las posibilidades de obtener mayoría absoluta pasan por obtener buenos resultados especialmente en Cataluña y Andalucía. Desintegrado el PSC, afronta por primera vez la imposibilidad de gobernar en solitario y la posibilidad de que IU y Podemos, le impongan condiciones y, desde luego, no estén dispuestos a tolerar los altos índices de corrupción de este partido.El PSOE no ha entendido también que el bipartidismo ha muerto y que su crisis es aún mayor que la del PP. A fin de cuentas, a la derecha del PP sigue sin aparecer ninguna fuerza política, mientras que a la izquierda del PSOE proliferan como hongos. A la vista de la imposibilidad de edificar una “gran coalición” (como la propuesta por Felipe González en plena campaña electoral) con el PP, la única posibilidad que tiene el PSOE es volver al gobierno es mediante una alianza con la izquierda radical. Y esa posibilidad le enajena a buena parte de su propio electorado… Nadie llorará al PSOE cuando haya muerto.La realidad es que el postzapaterismo era lo que cabía esperar y como habíamos anunciado desde 2007: desprovisto de cualquier dirigente con prestigio social, contando con media docena de mediocridades y pobres aprovechados que aspiran a sustituir a Rubalcaba, sin que queden en su nómina dirigentes ni militantes de prestigio (Rubalcaba era con mucho lo mejor que conservaba el PSOE), ahora se evidencia la vía muerta en la que encarriló José Luis Rodríguez Zapatero a su partido desde principios del milenio. Ciento cuarenta años de historia dilapidados por un indigente ideológico. Tras abjurar del marxismo, luego del socialismo democrático, anclado finalmente en una socialdemocracia hundida en todo el continente, compartiendo valores que ni siquiera eran socialdemócratas, sino humanistas–universalistas, el PSOE no ha sido capaz de recuperar, desde entonces, la iniciativa estratégica. Se conformó con enviar a Strasburgo a una Helena Valenciano, sin prestigio político, candidata de bajo perfil, útil solamente para muñir un consenso interior provisional. El fracaso estaba cantado desde el momento en que el PSOE se obstinó en hacer una campaña electoral reprochando a Arias Cañete el haber utilizado una consideración “machista”…Tras Rubalcaba lo que viene es un tropel de pobres espabilados (los Patxi López, las Chacón, los Madina, los Tomás López, las Susanas Díaz, etc y seguramente saldrán más aspirantes) ninguno de los cuales posee ideas, programa, ni magnetismo personal, todos ellos son mediocridades entre mediocres e individuos grises que confunden su habilidad para escalar en las bambalinas del PSOE con tener carisma y magnetismo personal. Después de Rubalcaba el diluvio…Tampoco el PSOE, por lo demás, se ha hecho eco del final del bipartidismo sancionado por el electorado, que el afecta a él en primer lugar al a vista de que su “estructura federal” resiste mucho peor los golpes y tiende más a la fragmentación. La dimisión de Rubalcaba, en otras condiciones, hubiera sido benéfica para el partido (a pesar de ser el último nombre “brillante” que quedaba en su nómina) e incluso lógica a la vista de los resultados, pero en las circunstancias actuales puede contribuir a acelerar el desplome del partido.Izquierda frente a derechaEl gran misterio de porqué la izquierda ha subido tanto y ha obtenido tan buenos resultados se debe sin duda… a que la derecha se ha quedado en casa. Nunca como hasta ahora ha sido tan claro que el abstencionismo ha embargado sobre todo a la derecha, mientras que la izquierda ha acudido puntual y disciplinadamente a votar. El resultado ha sido que sí, que ha subido la izquierda, pero plurifraccionada, y si Podemos se ha convertido en la estrella ascendente del firmamento político español, se ha debido especialmente a que ha sabido manejar mucho mejor que cualquier otro partido (por su misma estructura juvenil) las redes sociales y especialmente Tuíter.Por el contrario, el resto de partidos se ha conformado con realizar una campaña clásica utilizando medios de comunicación que la población ya no consulta: especialmente páginas de publicidad pagada en diarios que nadie lee y cuñas en radios que pocos escuchan y que apagan cuando dan publicidad. Podemos, sin embargo, ha dado una gran lección de cómo se aprovechan las herramientas de Internet 2.0, especialmente las redes sociales. No es fácil condensar un eslogan electoral en 140 caracteres permitidos por Tuíter y, sin embargo, Podemos lo ha logrado ¡y con qué resultado! Era normal que los 900.000 jóvenes que iban por primera vez a votar en esta convocatorio apostaran mayoritariamente por Podemos que respondía de manera extraordinariamente bien a sus rasgos generacionales.Frente a Podemos, las otras dos formaciones de la izquierda estatalista, IU y UPyD, han mejorado sus posiciones pero tras ímprobos esfuerzos y sin dejar nunca bien atados a sus nuevos electores que veremos si siguen apoyando a las mismas candidaturas en los próximos comicios. La izquierda presentada por IU (que elección tras elección sigue sumando pequeñas siglas al núcleo original del que ya nadie se acuerda, el viejo PCE, en un nombre que hoy es kilométrico e incluso símbolo de la impotencia de la coalición) y el centro–izquierda de Rosa Díaz, junto con Ciutadans (que, no lo olvidemos, afirma con seriedad ser una partido de “centro–izquierda”, a pesar de que sus apoyos dicen otra cosa muy diferente), han ido erosionando las bases socialistas, mucho más que recuperando un electorado nuevo.Pero estas elecciones no dicen nada sobre cómo será el comportamiento en las próximas convocatorias electorales de la derecha que se ha abstenido. No parece que le vaya a ser muy fácil al PP recuperar al mas de un tercio de sus electores que ha decidido no movilizarse, acaso porque ya han perdido la fe en que Mariano Rajoy pueda resolver los graves problemas de la sociedad española, acaso por la desidia y esa inmensa capacidad del presidente para aplazar la resolución de los problemas e incluso el encararlos decididamente.El fracaso de VoxReiteradamente hemos evitado incluir a Vox en el pelotón de la extrema–derecha porque, en realidad, es otra cosa: una simple fotocopia reducida del PP en la que la temática de derechas está un poco más presente, mientras que la centrista ha desaparecido. Vox ha cometido, desde su fundación, distintos errores políticos que, finalmente, le han pasado factura: en primer lugar circulaba por caminos ya trillados (como nos encargamos de denunciar en nuestro Dossier sobre la Extrema–Derecha ante las elecciones europeas). El programa, la experiencia, la intención de quienes ponían en marcha Vox, ya había estado presente en los mismos términos hace 20 años en la experiencia del PADE que, ya entonces demostró que la derecha estaba muy contenta con las siglas PP. Ahora se ha reiterado el mismo intento con idéntico fracaso.El programa de Vox contenía errores de bulto: el primero de todos pensar que sus temas eran “actuales” e interesaban a sectores amplios del electorado. La disolución de las autonomías constituía una propuesta tan “rotunda” que era, por sí misma, impracticable e imposible, una especie de boutadedestinada a llamar la atención pero no a realizarse en la práctica. Y el electorado está ya harto de “imposibles metafísicos”. En cuanto a la problemática anti–ETA, con todas las heridas que ha dejado y la sensación amarga de injusticia y de victoria de los asesinos, simplemente ha dejado de interesar a nuestro pueblo en la medida en la que el acuerdo pactado para terminar con ETA, ha sido firmado y rubricado tanto por el PSOE (que lo propuso) como por el PP (que, sin duda, fue consultado cuando se encontraba en la oposición) y el resultado ha sido un cese de la violencia… a cambio de una salida gradual de presos. Moralmente censurable, políticamente innecesario, pero efectivo… En cuanto a su insistencia en el tema del aborto, cuando la sociedad española ha vivido una campaña proabortista contraria a la reforma de la ley operado por Gallardón, la sensación de la derecha es que si la izquierda ha protestado sobre este tema, es que la reforma debió ir en dirección de sus expectativas. Sobre la “lucha contra la corrupción” era algo que todos los partidos, incluidos PP y PSOE proponían.Luego se han producido errores estratégicos notorios: el hecho de que Vidal–Quadras encabezara la candidatura no quiere decir que el origen catalán de éste fuera lo que aconsejara enfatizar la campaña en Cataluña, toda vez que el interesado lleva casi 20 años ausente.Cuando se convoquen las elecciones municipales, veremos lo que queda en pie de Vox y veremos si ha sido capaz con estos resultados de atraer a sectores descontentos del PP o bolsas de votos significativas. También el PADE durante un par de elecciones consiguió mantener algunos concejales antes de desaparecer por completo.De momento, Vox no va a ser la fórmula de derecha–derecha capaz de atraer a sectores significativos del PP y sacar de su posición abstencionista a sectores de la derecha sociológica.El por qué de estos resultadosLos resultados generales son, en su mayor parte, coherentes con lo que está ocurriendo en España en los últimos siete años: una crisis económica que es capaz de prolongar extraordinariamente su duración, generar 6.000.000 de parados, colocar al 25% de la población próximo al umbral de la pobreza o por debajo de él, forzar a la emigración económica a decenas de miles de jóvenes, aumentar la presión fiscal sobre las rentas procedentes del trabajo para pagar una deuda contraída por otros, una crisis de este tipo, decimos, solamente puede desembocar en una profunda crisis social. Y ésta al prolongarse extraordinariamente en el tiempo solamente puede derivar en una formidable crisis política en la que están incluidas todas las estructuras del Estado: partidos tradicionales, monarquía, justicia, autonomías, municipios, etc. Los mismos casos de corrupción son muestra de la incidencia de la crisis política que es, a fin de cuentas, la crisis del régimen nacido en 1978.Pero de todos los síntomas de la crisis política hay una que es particularmente importante: el final del bipartidismo. El misterio de la política española en los próximos años reside en saber cómo se va a portar un régimen concebido e ideado para el bipartidismo imperfecto, cuando las dos columnas en las que se sostenía (el centro–izquierda y el centro–derecha) aparecen como tocados y hundidos y la “banda de los cuatro” (PP+PSOE+CiU+PNV) ya no es, ni de lejos, la única protagonista de la vida política.A partir de ahora, como hemos dicho, se ha acabado la época de las mayorías absolutas, ha concluido el período de alternancia de ambos partidos en el poder. Ahora, si quieren gestionar una parte del poder tendrán que pactar con otros. Y el panorama político se complicará extraordinariamente generando una inestabilidad que, a partir de ahora, va a ser la imagen de marca del régimen hasta su disolución final.Es cierto que las elecciones europeas son relativamente poco importantes y que, tradicionalmente, en esos comicios aumenta la abstención, pero también es cierto que indican una línea inevitable e irremediable de tendencia. El bipartidismo será sustituido, pura y simplemente, por la inestabilidad. Una vez más se ha cumplido lo previsto por Thomas Molnar en su libro La Contrarrevolución: hay un momento en el que un régimen puede aplicar (porque es todavía fuerte) una reforma para salvarse; pero, habitualmente, dado que se siente fuerte, no percibe la necesidad de introducir reformas ni de corregir las tendencias más desagradables que han aparecido en su interior; por tanto, ese régimen sigue degradándose. Llega un momento en el que la reforma se hace acuciante, pero el régimen está tan absolutamente desgatado que ya es incapaz de operar cualquier reforma y, simplemente, se produce el desplome interior. El sistema político nacido en España en 1978, está hoy reproduciendo este esquema de manera absolutamente maquinal. Sabemos, pues, lo que tiene ante la vista.Addenda¿Algo que añadir sobre la extrema–derecha?En ese magma en el que se mueven cinco partidos, queda claro que uno de ellos es el representante indiscutible del sector histórico, FE–JONS, y que todos aquellos que se reclamen y se reconozcan en esa fisonomía terminarán convergiendo allí. Parece improbable que puedan perpetuarse dos grupos que utilicen el mismo emblema del yugo y de las flechas, por tanto, si la lógica tiene alguna repercusión en este ambiente, ambos grupos deberían de converger y La Falange estaría ahora en una buena situación para abordar la negociación que llevara a la unidad histórica de las falanges. Una iniciativa de este tipo parece casi obligada.Falange Española de las JONS, no lo olvidemos, ha hecho una buena campaña con escasos medios. Ahora bien, es inútil pensar que el techo de una formación de este tipo puede ir más allá de sumar los votos cosechados por otros grupos similares. Por bien que actúe su dirección, lo evidente es que su imagen remite a otros tiempos y a otros valores, ya lejanos en el tiempo y que el “nacional–sindicalismo” dice muy poco a una sociedad que considera como el único sindicalismo existente el que protagonizado por las siglas UGT y CCOO, que han traicionado a la clase obrera.Hemos dicho en muchas ocasiones si no sería mejor que los falangistas pensaran en otro modelo organizativo y no en la forma de “partido político”. La revista mensual Patria Sindicalista demuestra que, quizás, tender hacia la formación de una “escuela de pensamiento” sería mucho más productivo en términos de persistencia del falangismo en la sociedad futuro. Preparando cuadros y dirigentes políticos, como en otro tiempo hizo la Escuela de Propagandistas Católicos, se conseguiría influir mucho más en la sociedad y no restringirse a los altos muros de un partido político.Hará falta ver si en los próximos meses ambos grupos falangistas logran reabrir conversaciones para su unidad definitiva y para la elección de una estrategia de futuro.Los segundos en resultados en la extrema–derecha ha sido la coalición Iniciativa Social, un nombre equívoco en la medida en que a poco que el simpatizante se acercaba a su temática se percibía claramente que, tras este rótulo, proseguía ese monotema obsesivo del aborto, destacando con mucho sobre cualquier otra temática. Creemos que el intento está encarrilado hacia una vía muerta y sin salida no ahora, sino desde el momento mismo de su arranque. Si en esta ocasión IS (AES+CTC+FyV) ha perdido buena parte de los votos que AES en solitario obtuvo hace cinco años, se ha debido, especialmente, a la competencia de Vox. Lo que se abre a partir de ahora –nuevamente, si hemos de pensar en términos lógico, lo que es del todo evidente que hagan los protagonistas– es que ambas formaciones (IS–AES y Vox) se planteen un futuro común. No hay, simplemente, no hay espacio para ambas. Y, de momento, a pesar de sus resultados limitados, Vox arrincona a AES. Quizás sea la forma y el momento de dar por concluida la experiencia neo–piñarista, social–cristiana, o como prefieran llamarla.No hay más posibilidades de convergencia, ni de fusiones o desapariciones de siglas. DN y MSR prosiguen como hasta ahora. El papel de DN pactando primero con LEM, luego ausentándose sin dejar señas para reaparecer en Soluciona, para finalmente presentarse solo, ha sido una peripecia sin precedentes, no por previsible, menos exótica. Tiene gracia que tanto DN como MSR consideren que “han vencido” (e incluso lo expresen así) y que, a partir de ahora, “la lucha continúa”, lo que implica tener, simplemente, más moral que el Alcoyano. Hay que reconocer que en estas elecciones, ambas formaciones se han preocupado por reinventarse a sí mismas: han ido agrupando a expulsados de otros grupos, bolsas de militantes recuperadas aquí y allí, nombres surgidos de los más variados ambientes, para componer sus listas. Ni aun así han conseguido escapar a los magros resultados de otras veces, que en ambos casos indican –por pura lógica– que no logran interesar salvo a muy pocos (error técnico en los recuentos incluido). Ahora piensan que “en las municipales será nuestra hora”… pero parten en situación de desventaja. Y, por lo demás, el tiempo no pasa en vano: MSR tiene 14 años y DN está por cumplir los 20.De todos estos fragmentos –por mucho que parte de sus fondos sean utilizados en viajes lowcost a visitar a “partidos hermanos” del extranjero en la creencia de que presentarse como “socios” les reportará algún interés por parte de los medios de comunicación españoles– no podrá salir nunca nada parecido a los movimientos que han dado un prodigioso salto adelante en Europa. Pero esta es otra historia.