Recordar simplemente que también se contempla profanar la tumba de José Antonio, tal como propuso el PSOE el año pasado con el consenso (tácito o explícito) de TODOS los diputados del Congreso. Todo ello demuestra, por enésima vez, que España se halla en un estado grave de emergencia nacional, por todos los flancos. Pero no por la valentía, la pericia, la inteligencia, la formación, la prudencia, la visión estrátegica, la bondad, el aprecio por la verdad o la astucia de sus enemigos -que son sólo unas pocas de las virtudes que no poseen- sino porque no queda prácticamente nadie que defienda a la Nación Española, ni siquiera desde postulados ideológicos erróneos.

Desgraciadamente, lamento decir que esto sólo puede suceder en España.