EL ISLAM Y LAS CRUZADAS.
Actualmente las Cruzadas están causando más devastación que la generada durante sus tres siglos de duración, no en términos de vidas perdidas y propiedades destruidas, sino mediante una destrucción más sutil, la de la verdad histórica.

Todo, (bueno, prácticamente todo) lo que sabemos sobre el islam y las Cruzadas es falso. Porque la mayoría de los manuales de texto y libros de historia populares están escritos por académicos de izquierdas y apologistas del islam que pretenden justificar su agenda política actual mediante controvertidos hechos "históricos".

Por ejemplo:
- Mahoma JAMÁS predicó paz y tolerancia. Dirigió bandas de asalta caravanas y ejércitos con los que luchó militarmente contra sus enemigos (los que no le reconocían como Profeta).
- el Corán ordena a los musulmanes hacer la guerra a los judíos y cristianos.
- la tan cacareada "Edad Dorada" del islam fue claramente inspirada por no musulmanes.
- lo que conocemos actualmente como "mundo islámico" es el resultado de una serie de conquistas militares de países no musulmanes.
- todo musulmán que abandona su religión tiene grandes motivos para vivir atemorizado, incluso en países occidentales.

Las Cruzadas han pasado a ser no sólo un pecado fundamental de la Iglesia católica, sino del mundo occidental en general (no en vano Occidente --> Europa --> Cristianismo).
Son la prueba A de la acusación según la cual el actual enfrentamiento entre el mundo musulmán y la civilización poscristiana occidental es responsabilidad de Occidente, que ha provocado, explotado y maltratado a los pacíficos musulmanes desde la época en la que los primeros guerreros francos entraron en Jerusalén; esa es al menos la opinión de Bill Clinton: "en efecto, en la 1ª Cruzada, cuando los soldados cristianos tomaron Jerusalén, quemaron en primer lugar una sinagoga con trescientos judíos dentro, y en el Monte del Templo asesinaron a todas las mujeres y niños musulmantes de la multitud. Las crónicas de la épcoa muestran a los soldados caminando por el Monte del Templo, un lugar sagrado para los cristianos, con la sangre hasta las rodillas. Puedo decirles que a día de hoy se sigue contando esta historia en Oriente Medio, y que seguimos pagando por aquello" (Bill Clinton en REmarks as delivered by President William Jefferson Clinton, Georgetown University, November 7, 2001).

Curioso que en este "análisis" Bill Clinton repita lo mismo que decía Osama ben Laden, que en muchos de sus comunicados denomina a su "organización": Frente Islámico Internacional para la Yihad (lucha sagrada) contra los judíos y los cruzados, en vez de Al-Qaeda, y se lancen fetuas por la "yihad contra los judíos y los cruzados".

El 8 de noviembre de 2002, poco antes de que se iniciara la guerra con que se derrocó a Sadam Hussein, el jeque Bakr Abed Al-Razzaq Al-Samaraai predicaba en la mezquita Madre de Todas las Batallas de Bagdad acerca de "esta hora difícil por la que está pasando la nación islámica, una hora en la cual afronta el desafío de las fuerzas de los infieles, judíos, cruzados, americanos y británicos".

Igualmente, cuando en diciembre del 2004 unos yihaidistas bombardearon el consulado de EEUU en Yida (Arabia Saudí) dijeron que el atentado formaba parte de un plan más amplio para contraatacar a los "cruzados". "Esta operación es una de varias organizadas y planeadas por Al-Quaeda como parte de la batalla contra los cruzados y los judíos, y también como parte del plan para obligar a los no creyentes a abandonar la península Arábiga".

Dijeron que los guerreros de la yihad "lograron penetrar en uno de los grandes castillos de los cruzados en la península Arábiga y entrar en el consulado de los EEUU en Yida, desde el cual controlan y manejan nuestro país" (Al-Quaeda-linked group takes credit for Saudi attac, CNN, 7 diciembre 2004).

¿Uno de los grandes castillos cruzados en la península Arábiga?
¿Por qué tienen los terroristas islámicos esa fijación con los castillos antiguos?
¿Está Clinton en lo cierto cuando considera las Cruzadas como la causa de los problemas actuales y los actuales conflictos en Irak y Afganistán como reediciones del ethos cruzado?

En alguna medida, podría decirse que sí. Cuanto mejor se comprendan las Cruzadas, el por qué se llevaron a cabo y cuáles eran sus verdaderos motivos, mejor podremos comprender el conflicto actual.
Las Cruzadas, de un modo que sólo Bill Clinton y los terroristas del consulado de Yida, alcanzan a comprender, son la clave para entender buena pare de lo que ocurre en el mundo.

Según la apologista occidental del islam Karen Armstrong llega incluso a culpar a las Cruzadas de los errores de percepción occidentales sobre el islam: "a partir de las Cruzadas, la cristiandad ha desarrollado una visión estereotipada y distorsionada del islam, al que tiene por enemigo de la civilización honrada ... Por ejemplo, durante las Cruzadas, una serie de guerras santas brutales desencadenadas por los cristianos contra el mundo musulmán, el islam fue descrito por los monjes eruditos de Europa como una fe intrínsecametne violenta e intolerante, que sólo ha podido imponerse por medio de la espada. El mito de la supuesta intolerancia fanática del islam ha pasado a ser un lugar común en Occidente" (Karen Amstrong en Islam: A Short History, Modern Library New York, 2000, pags. 179-180).

En cierto sentido, Armstrong tiene razón, al parecer, ningún ser humano puede estar equivocado todo el tiempo. Cuando se trata de hablar del islam, no es posible dar crédito a todo lo que se dice, especialmente cuando en el XX y XXI también vemos sus efectos. La desinformación y las medias verdades sobre lo que enseña el islam y lo que creen los musulmanes radicales han invadido las radios e incluso influido en las políticas de varios gobiernos.
Algunos grupos mediáticos y académicos han puesto de moda el responsabilizar en gran medida, o totalmente, no al islam y los musulmanes, sino a EEUU y otros países y gobiernos. Afirman que sigue vigente un modelo de maltrato al mundo islámico por parte de Occidente, que comenzó hace siglos: en la época de las Cruzadas.

Pero lo cierto es que las semillas del conflicto, incluso el actual, fueron plantadas mucho antes de la Primera Cruzada. Para comprender adecuadamente las Cruzadas y su peculiar resonancia en el actual conflicto con los radicales musulmanes hay que volver sobre la figura del Profeta y de la religión por él fundada.

Respecto a las Cruzadas fueron una reacción a ciertos hechos que se desencadenaron más de cuatrocientos cincuenta años antes del comienzo de las mismas.

Una de las claves para entender el fenómeno islámico es la figura de Mahoma. Cuando se debate y opina sobre sobre la naturaleza del islamismo radical, sobre la posibilidad de su evolución, sería conveniente estudiar la vida y obra de Mahoma.

Una actitud muy difundida: el multiculturalismo parte de la pretensión de que ninguna cultura es superior a otra ni, en consecuencia, podemos juzgarla. Una actitud que no puede ocultar entre su palabrería el desprecio por la civilización occidental (auto odio) y su consecuencia: asimetría al juzgar.
Muchos que en los campus estadounidenses denuestan a los "viejos filósofos blancos" por patriarcales y autoritarios no cesan de admirar la sabiduría del santón sufí de turno. La misma asimetría que lleva a un presidente a pedir disculpas inmediatas, como un resorte, a la comunidad islámica por unas inofensivas caricaturas de Mahoma mientras guarda un atronador silencio sobre fotografías pornográficas de Jesús y la Virgen María.

La figura de Mahoma es importante porque su personalidad impregna toda la esencia del islam. Mohamed ibn Abdalá ibn Abd al-Muttalib, el profeta del islam, era un hombre de guerra, que enseñó a sus seguidores a luchar por su religión. Dijo que su dios, Alá, les había ordenado tomar las armas, y Mahoma, que no era un general de oficina combatió en numerosas batallas.
Esto es crucial para cualquiera que quiera comprender realmente la causa de las Cruzadas, acaecidas hace varios siglos, o del surgimiento en la actualidad del movimiento yihaidista global.
En el curso de esas batallas Mahoma articuló muchos principios que han sido asumidos por los musulmanes hasta hoy. Interesa registrar algunas de las características de sus batallas si bien muchos analistas persisten en ignorar estos antecedentes vitales.


MAHOMA EL INVASOR
Antes de asumir el papel de profeta, Mahoma ya tenía experiencia guerrera. Tras el 610 año de las revelaciones (arcángel Gabriel) comenzó a predicar a su tribu la adoración a un solo dios y su propia posición como profeta. En la Meca no fue bien recibido por sus hermanos qurais que se negaron a renunciar a sus dioses y reaccionaron despectivamente a su llamamiento. La rabia y frustración de Mahoma fueron evidentes.
Cuando su tío Abu Lahab rechazó su mensaje, lo maldijo, a él y a su mujer, en lenguaje violento (conservado en el Corán).
Finalmente pasó de las palabras violentas a los hechos violentos. En 622 abandonó su Meca natal para trasladarse a una ciudad cercana: Medina, donde una banda de guerreros tribales lo aceptaron como profeta y se proclamaron leales a él. En Medina los nuevos musulmanes empezaron a asaltar las caravanas de los qurais, muchas veces lo hacía Mahoma personalmente. Estas acciones mantuvieron al incipiente movimiento musulmán y contribuyeron a conformar la teología islámica. Por ejemplo, una de las veces, durante el mes sagrado de Rajab, en que las luchas estaban prohibidas, asaltaron una caravana qurai en Jakla (cerca de La Meca) cuando volvieron al campamento Mahoma rehusó compartir el botín, no quiso saber nada de los asaltantes y dijo: "yo no les ordené que pelearan durante el mes sagrado" (Ibn Ishaq's Sirat Rasul Allah, The Live of Mohamed, Oxford University Press, 1955, pags. 287-288).
Pero luego vino una nueva revelación de Alá en que se explicaba que la oposición de los qurais a Mahoma era una transgresión mayor que la violación del mes sagrado. Es decir, se justificaba el asalto.

Y esta revelación es trascendental porque condujo a un principio islámico que ha tenido repercusiones hasta hoy. El bien pasa a identificarse con todo lo que redunda en los intereses o beneficio de los musulmanes sin importar si constituye una violación de la moral u otra ley. Los principios morales de los 10 mandamientos y en otras enseñanzas de otras religiones anteriores al islam fueron dejados de lado para situar en lugar prioritario el principio de la conveniencia.

En la primera escaramuza seria los seguidores de Mahoma salieron victoriosos, pero no tuvieron ninguna piedad ni clemencia con los qurais derrotados, a los que degollaron y sepultaron. Luego se referían a ellos jocosamente como "los del hoyo" y planteó una pregunta teológica ¿Os habéis planteado si lo que Dios os ha prometido es verdad? Yo he visto que lo que mi Señor me prometió es verdad.
Cuando se le preguntó porqué hablaba a los cuerpos de los muertos, él respondió: "vosotros no podéis oír mejor que ellos lo que yo digo, pero ellos no pueden responderme" (Ibn Ishaq, op. cit. pag. 306).

Con la victoria los musulmanes pasaron de ser una banda despreciada a una fuerza a tener en cuenta. Con esta victoria se instalaron en la mente de los musulmanes ciertas actitudes y afirmaciones, muchas aún vigentes a las actuales, así:
- Alá va a garantizar a su pueblo la victoria contra enemigos superiores en número o poder mientras se mantengan fieles a sus órdenes.
- las victorias permiten a los musulmanes apropiarse de las posesiones de los vencidos y tomarlas como botín.
- la venganza sangrienta contra los enemigos pertenece al Señor y a quienes se someten a él en la Tierra. Éste es el significado de la palabra islam = sumisión.
- los prisioneros capturados en la batalla contra los musulmanes pueden ser condenados a muerte por decisión de los líderes musulmanes.
- los que rechacen al islam son "las criaturas más viles" (Corán, 96) y no merecen piedad.
- cualquiera que insulte o incluso se oponga a Mahoma o a su pueblo merece una muerte humillante, si es posible, por decapitación. (coherente con la orden de Alá de golpear en el cuello a los no creyentes, Corán 47:4).

Esta primera batalla ganada (Badr) fue el primer ejemplo práctico de lo que se conocería después como doctrina islámica de la yihad, una doctrina que resulta clave para comprender las Cruzadas y los conflictos actuales.


ASESINATO Y ENGAÑO
Enardecido por la victoria Mahoma incrementó sus incursiones. También endureció su actitud hacia las tribus judías de la región que le rechazaban como profeta. A partir de este rechazo las proclamas proféticas de Mahoma hacia los judíos adquirieron un carácter violento y enfatizaron el castigo terrenal.
Mahoma la emprendió contra un poeta judío quien según Ibn Ishac (primer biógrafo) compuso versos de amor insultante para las mujeres musulmanas. Mahoma preguntó a sus adeptos ¿quién quiere matar al poeta? y le dió permiso para mentir y llevar al poeta (K'ab ben Al-Asharaf) hacia una emboscada. Así engañado y asesinado se libró de él.
Tras el asesinato Mahoma emitió una orden general: "matad a todos los judíos que caigan en vuestro poder", no era una orden militar, el siguiente en caer fue un comerciante: Ibn Sunayna que tenía relaciones sociales y comerciales con musulmanes.
El asesino comentó a quién se lo reprochó (por su falta de arrepentimiento) "si el que me ordenó matarlo me hubiera ordenado matarte a tí, te habría cortado ya la cabeza".

En Unud se constituyó otro modelo que se ha mantenido hasta hoy, los musulmanes tomarán cualquier agresión como pretexto para la venganza sin considerar si habían sido ellos los que la provocaron.
Los yihadistas y los aliados actuales de la izquierda y hasta los políticamente correctos usan los sucesos actuales como pretextos para justificar sus acciones una y otra vez, afirmando que sólo están reaccionando a las graves provocaciones de los enemigos del islam, aunque a veces se remontan a las Cruzadas aunque no más allá.


MITO DE NEGOCIACIÓN
Cuando Mahoma rompió el acuerdo que había adquirido con los qurais y convalidó el principio según el cual sólo es bueno lo que resulta ventajoso para el islam y sólo era malo lo que le perjudicara.
Una vez el tratado fuera desechado formalmente, los juristas islámicos enunciaron el principio general de que las treguas no podían durar más de diez años y sólo debían realizarse con el objetivo de fortalecer las fuerzas debilitadas para volver al ataque.


EL CORÁN EL LIBRO DE LA GUERRA
Como la vida profética de Mahoma estuvo marcada profundamente por la sangre y la guerra, no sorprende que el Corán sea igualmente violento e intransigente. El Corán es el único de los textos sagrados que da consejos a sus adeptos para que guerreen con los no creyentes.


EL CORÁN ACONSEJA LA GUERRA.
En el Corán hay más de 100 versículos que exhortan a los creyentes a emprender la yihad contra los no creyentes.
Y es una guerra que se declara, tanto a los no creyentes, como a los creyentes que no cumplen plenamente con la fe.
Y los versículos pacíficos del Corán, los considerados tolerantes, en realidad han sido cancelados según la teología islámica.

No hay nada comparable, ni en la Biblia ni en otros textos religiosos, a las violentas exhortaciones a la violencia del Corán.

Lo más tolerante que encontramos en el Corán es cuando incita a los creyentes a dejar abandonados a los no creyentes en sus errores.

Según el Corán (2:256) ningún musulmán debe obligar a nadie a aceptar el islam. "No cabe la coacción en asuntos de fe. Ahora la guía recta se distingue claramente del extravío: por eso, quien rechaza a los poderes del mal y cree en Alá, ciertamente se ha aferrado al soporte más firme, al que nunca cede".
¿Realmente esta fórmula es lo que entendemos por tolerancia? Podría ser una imitación razonable si fuera todo lo que el Corán dice al respecto, pero no lo es.


LOS YIHADISTAS CITAN LAS BATALLAS DE MAHOMA PARA PROBAR QUE LA YIHAD NO ES SÓLO DEFENSIVA
En un artículo titulado: "The Ture Meaning of Yihad" de 2008 en la página web: khilafah.com, afiliada al grupo yihadista Hizb ut-Tahrir, Sidik Aucbur cita el ejemplo de Mahoma para contradecir a los que argumentan que la yihad es meramente defensiva.

Un somero estudio de la vida del Profeta muestra que:
- la batalla de Mutan fue instigada por los musulmanes contra los romanos pese a su desproporción (3.000 musulmanes ante 200.000).
- la batalla de Hunain fue inevitablemente breve después de que los musulmanes hubieran conquistado La Meca.
- la batalla de Tabuk también fue instigada para destruir finalmente a los romanos.
En estas tres batallas (629 y 630) intervino Mahoma.

Y a partir del ijma (consenso) de los sahaba (compañeros de Mahoma) también ellos instigaron a la yihad en Irak, Egipto y África del Norte.
Además el estatus del mártir del islam es el más elevado por lo que la yihad no puede quedar situada en un nivel inferior a éste.


¿SON COMPARABLES BIBLIA Y CORÁN EN VIOLENCIA
Los apologistas islámicos suelen argumentar a favor de una equivalencia moral entre islam y cristianos.
¿Han sido violentos los musulmanes? también lo han sido los cristianos.
¿los musulmanes predican la yihad? los cristianos efectuaron Cruzadas.
¿el Corán predica la guerra? la Biblia tiene versículos violentos.
Aseguran que estas cosas pueden encontrarse en todas las tradiciones religiosas y que ninguna es superior o inferior en su capacidad de inducir la violencia.

¿ES CIERTO ESTO?
Los apologistas islámicos dicen haber encontrado, incluso en el Nuevo Testamento, algunos pasajes que exhortan a los creyentes a la violencia. Suelen centrarse en 2:
San Lucas 19:26-27. La falacia está en que San Lucas comenta las palabras de un rey en una parábola, no las instrucciones de Jesús a sus adeptos, pero es algo que sutilmente se ignora.
San Mateo, 10:34-35. (No penséis que he venido a traer paz, sino espada. Sí, he venido a enfrentar al hijo con su padre, a la hija con su madre, a la nuera con la suegra"
Si este pasaje fuera realmente un llamamiento literal a algún tipo de violencia, sería una yihad intra familiar. Pero invocarlo como equivalente a los pasajes coránicos de la yihad (más de 100) resulta absurdo.
Ni los cruzados más venales y codiciosos han invocado pasajes como esos. Jesús menciona la espada en un sentido alegórico, hacer una interpretación literal de ese texto implica desconocer a Jesús que a diferencia de Mahoma no condujo partidas de asalta caravanas ni ejércitos. Además la cualidad poética de la Biblia está presente en toda su extensión.

Lo que más fielmente refleja el talante de Jesús es cuando dice: "al que te abofetee en la mejilla derecha preséntale también la izquierda, al que te robe la capa ofrécele también el sayo, etc.".

La orden coránica de guerrear contra el no creyente es GENERAL y UNIVERSAL. A lo más que llega el Antiguo Testamento es a que los israelitas hagan la guerra puntualmente a algunos en una época determinada.


EL ISLAM, LA RELIGIÓN DE LA GUERRA
El Corán es bastante preciso respecto a la guerra de los musulmanes contra los no creyentes, pero, en general, es poco claro. Todo el Corán es un monólogo en el que Alá es el único que tiene la palabra (con escasas excepciones), y sin manifestar interés por la continuidad narrativa. Habla con Mahoma sobre varios acontecimientos de la vida del Profeta y sobre los primeros profetas musulmanes (especialmente Abraham, Moisés y Jesús) así su lectura es el recorrido a través de una conversación privada entre dos personas desconocidas: resulta confuso, desorientador e incomprensible.

- Mahoma enseñó a sus seguidores que no hay nada mejor, ni más santo, que la yihad.
- Mahoma dijo a sus hombres que ofrecieran a los no musulmantes solamente tres alternativas: la conversión, el sometimiento o la muerte.
- estas enseñanzas no son doctrinas marginales ni reliquias históricas: se siguen enseñando dentro de la corriente principal del islam y otras.

etc. etc.