Re: ¿Cuánto vale la vida?
Hay otro aspecto que no ha sido tocado en este hilo: En España, la Seguridad Social cubre el costo de un aborto legal; es decir, todos pagamos el genocidio.
Dicho esto, quiero abundar algo en la confusión que existe en muchos católicos acerca de la equiparación entre aborto y pena de muerte. Por supuesto, son temas bien distintos y no resultan comparables. Tres términos definen la gravedad del aborto provocado: libre, directo e inocente.
Libre: No podría considerarse asesinato, por tu parte, un aborto que te obligan a realizar bajo amenazas. Sí pudiera existir un pecado de cobardía.
Directo: No es lo mismo tomarte una pócima abortiva con el propósito de matar que tomarte una pócima que pudiera resultar abortiva con el propósito de curarte de una grave enfermedad. Aquí, quizás, podríamos hablar de negligencia más que de asesinato.
Inocente: El nasciturus siempre es inocente. No es culpable ni de las enfermedades de la madre ni de una posible violación de la misma.
Si, de forma libre y directa, matas a un inocente, eres un asesino.
Combatiendo en la guerra, estás cumpliendo un deber, sometido a la autoridad de tus superiores. Si matas a un soldado del bando contrario, totalmente inocente en su conducta moral, no estás asesinando, pues tu actuación no es fruto de una decisión personal y libre. Lo que tú has hecho, lo has hecho cumpliendo órdenes. Eso, sin meternos en el derecho de las naciones a defenderse.
Mediante la pena de muerte, la sociedad, a través de sus instituciones, castiga a un culpable. No hay inocencia. Además, no es una actuación individual.
"La Verdad os hará libres"
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