SOBRE LA TAUROMAQUIA
Pasando unos días en mi piso de Punta Umbría, en la costa onubense ( Que fue parte del Reino de Sevilla hasta los primeros tercios del siglo XIX, cuando los centralistas destrozaron a la Patria ),me he permitido el lujo de reflexionar sobre la tauromaquia. No obstante, fue en la taberna de Miguel, un hijo de Coria del Río afincado acá en Punta, donde desarrollé mi gusto por el flamenco y donde oí hablar mucho del tauromaquia, gracias a que aquí paraba, entre otros, el Batalla, un torero onubense afincado en Sevilla.
En ese engendro de medios de manipulación al servicio del caciquismo masónico “ andalucista “, llamado Radio-Televisión “ Andaluza “, concretamente en Canal Sur, ponen un entretenido programa que se llama “ Toros para todos “, a eso del mediodía si mal no recuerdo, sobre las 2 de la tarde o así. Poco antes de que un servidor de ustedes se ponga a comer, o a rumiar si se quiere. Y allí que vi ese programa, muy entretenido; tratando ilustrativamente de todo lo que concierne a la que aún se dice que es la Fiesta Nacional. Desde las entretelas de las ganaderías y los mayorales hasta las plazas, desde la alimentación y cuidado del ganado bravío hasta los colosos del público, y así todo.
A día de hoy, supone una moda, acaudillada por el progresismo liberal y los “ ecologistas “ ( o ecolo-jetas ) que se apuntan al carro, de meterse con la tauromaquia con todo y para todo. A los menores de edad se les da por ley charlas lésbicas en las escuelas y se les enseña las bondades del kamasutra; amén de venderse preservativos en los colegios, campañas de un estado que firma abortos con el beneplácito del “ monarca “ constitucional ( Recordemos que esta forma de “ gobierno “ es la predilecta para la Gran Logia Unida de Inglaterra ). En los debates circenses, donde se suele acorralar a los defensores de la tauromaquia, pocas veces se exponen claramente las cosas; aunque yo escuché una vez hablar al torero José Antonio Canales Rivera ( Sangre de una insigne saga tauromáquica de los Reinos del Andalucía ) bastante bien ante la cara de culo que se iba desarrollando en Pilarica Rahola, esa ex diputada del partido terrorista venido a menos ERC y ahora apuntada al carro de las ganancias sociatas. Cómo le dijo una vez el sociata pero gracioso José Luis Coll ( Compañero del franquista Luis Sánchez Polack, “ Tip “ ): “ Rahola, Rahola, catalana pero española “; ante el mosqueo de aquella bobalicona……En dos palabras, ¡ qué risa !
El origen de la tauromaquia, al menos el de una cultura trascendente táurica, si se prefiere, es antiquísimo, y enlaza el tronco racial de las culturas paleoeuropeas del Mediterráneo: Los pueblos del mar. Desde la civilización minoica de Creta ( Patriarcado de la civilización helénica; que no son los indoeuropeos, bastante posteriores ) hasta los tartessos del Sudoeste de la Iberia ( Aquí, las aportaciones indoeuropeas, que no son moco de pavo, las cosas como son; siempre fueron a remolque de las grandes civilizaciones paleoeuropeas ). Claro que han variado las formas; pero está claro su innegable origen histórico. Al entrar los visigodos en Hispania se empapan de esta nobleza guerrera y artística. Como los indoeuropeos llegados a Grecia se empapan de la anterior civilización minoica y lo desarrollan en sus cultos. Para la cultura ibérica, el caballo y el toro eran máximas “ divinidades “ ligadas al arquetipo del guerrero enraizado en la naturaleza; el caballo y el toro fueron los elementos ( Lo que hoy conocemos como rejoneo ) que desarrollaron las fiestas taurinas a lo largo y ancho de la Piel de Toro en el Medioevo. Y eso por no hablar de la “ malabar “ tradición de los valentones recortadores, presente en multitud de cuadros y grabados que nos sobrecogen con sus saltos ante la noble raza de lidia, y aún tan presente en la Corona Portuguesa.
Los pseudonazis se enganchan al carro progre denunciando ello como “ tortura “. Realmente, no voy a negar que en la tauromaquia existe un cierto halo de crueldad. Y es que, bueno, la vida es cruel. ¿ No es cruel el león que mata al antílope, el gato que mata al ratón, el perro que se ensaña con el gato…? O, ya puestos, ¿ no es cruel el caballo que arranca la hierba de la tierra……? Estamos hablando de relativismos un tanto absurdos.
Si la tauromaquia desapareciera, tal y como quieren los rojiprogres-ecolo-jetas y los pseudonazis, desaparecería esa maravillosa raza de lidia tan antigua y desarrollada por el brío de los campos españoles. Esto no lo quieren ver estos grupúsculos, que si defendieran realmente la flora y la fauna, no establecerían compadrazgo con ideologías como el comunismo, que provocó grandes catástrofes ecológicas tales como la desecación del Mar de Aral en las Rusias o la contaminación sangrante de los ríos checos. Eso por no hablar, claro está, de la cantidad de seres humanos que, continuando la labor iniciada ya por la Revolución Francesa, han materializado en tantos años de barbarie.
El toro vive mejor que muchos canarios en sus diminutas jaulas, poniendo también por caso. Y no se defiende a un noble animal con posturas de burgués ignorante. Porque lo que ellos quieren es su exterminio. Les molesta la misma simbología. Y que ello sea una característica de la Hispanidad. Algunos ignorantes como Ramón Bau, secundando las arengas de Heribert Barrera, dicen que fue la emigración andaluza la que instauró por la fuerza la tauromaquia…Otros, incluso dicen que Franco todo lo hizo para anular la identidad catalana…Vamos, que antes que los andaluces llegaran allá y que Franco llegara a dictador nunca hubo plazas de toros en Cataluña…De hecho hay quien defiende que la plaza más antigua radica en aquel noble Principado de la Corona de Aragón. Como tampoco hubo catalanes que emigraron a los Reinos Andaluces y al Reino de Granada…Claro, pero dirán que los andaluces han venido para subdesarrollar y que como el catalán siempre conservó el componente ario franco-gótico iba para blanquear-civilizar…Esto en el mejor de los casos, pues se suele ignorar que hubo muchos emigrantes catalanes en el Sur; comerciantes venidos a menos muchos de ellos. Como vemos, los postulados de los rojos no son muy distintos que los de los nazis.
Quien escribe esto no es precisamente el más entendido en la tauromaquia. Yo también tuve mis épocas, y hasta hace relativamente poco, de oponerme a tal, principalmente por desconocimiento. En mi casa no son muy aficionados a los toros mis padres, pero sí lo fueron mis abuelos. Tengo fotos de ambos en la Maestranza, y esas cosas. No es que mis padres se opongan ni mucho menos, pero que prefieren verlos por la tele mejor……Como ya le pasa desde hace mucho tiempo a mi señor padre con el fútbol.
Desde luego, recabando testimonios del ganado de mi pueblo, que desapareció pero que aún lo recuerdo, y de gentes que trabajan por ello, podemos afirmar que la crianza del toro es superior en todo ante como están establecidas la mayoría de las granjas para el mercado capitalista. Unos animales que viven hacinados, eso es tortura en vida. Su vida es mero motivo de especulación ante la inflación de las sociedades de los euros y los dólares. No se respeta lo más mínimo su crianza, con unos piensos compuestos llenos de aditivos químicos ( Drogas, para hablar claro ) que ponen la puesta a punto a los “ ideales “ pesos como exigencia mercantilista, encerrados en jaulas que nos hacen parecer las cárceles de la dictadura árabe-alahuí de parte de la Berbería como una paradisíaca estancia. Ya apenas existen corrales, cosa que yo conocí hasta poco antes de hacer la Primera Comunión. Recuerdo incluso una vaquilla en el corral de mi abuelo materno.
Por si ellos no lo saben, el toro también se come. Claro está que el ganado vacuno sufre esas exigencias y es alimentado con piensos brutales para aumentar su peso y cosas así. Todo ello ha entrado parte en el juego de la dictadura del capital. Y eso por no hablar de la intromisión de la química en los campos……Pero no, los rojiprogres prefieren la química para el cuerpo humano……
Las críticas a la caza suelen venir por donde mismo. Ridículo es oponerse a la tradición cinegética con esos “ argumentos “ basuriles-propagandísticos. Yo estoy a favor de proteger las especies en peligro de extinción con sincera escrupulosidad, y creo que la política, si existiera en autenticidad, debería reunirse con los interesados por la protección del patrimonio animalístico en particular y natural en general. No entiendo la cacería como un mero concurso para vacilar de puntería. Pero sí entiendo su ligazón con la tierra y su función alimenticia a la antigua usanza. Y entiendo que muchos cazadores que tengan cabeza son los mayores protectores del Medio Ambiente. Si el ecologismo se dignara a analizar las cosas con sentido común y defendiera posiciones justas, en absoluto me opondría. Pero el ecologismo, al igual que los sindicatos cipayos, están compuestos por enchufados que sólo quieren mamar de las subvenciones del Gobierno. Y vengan ropas caras y cochazos; y fiestones donde la cocaína y la grifa no falten. Eso también se da en el ambiente pijo-señoritingo. Como vemos, así luchan……No son tan distintos.
Últimamente, la Fiesta Nacional viene teniendo repercusión popular en el Principado Español de Cataluña. Pobres yonquis arreados por la izquierda intentan hacer lo que saben: El circo, ante un pueblo cuatribarrado que quiere disfrutar de la fiesta, y máxime con su paisano Serafín Marín. Batzegada/Moviment Patriòtic Catalá se ha apresurado a colocar banderas tradicionales en los tendidos, tales como la Cruz de San Jorge, la Cruz de Borgoña, la Senyera del Principat, la Senyera Reial Valenciana, la Rojigualda Nacional, etc., ante la animosa simpatía de no poco público.
Yo, desde luego, pude disfrutar en la Jornada de la Familia de la Comunión Tradicionalista Carlista de Sevilla en el Ronquillo ( Sevilla ), en aquella capea donde asistieron correligionarios del Reino de Toledo y de otros pagos. Donde Juanma Rodríguez hizo sus pinitos en el ruedo y donde alguno acabó rodando……Y donde Javier López mostró su habilidad para esquivar y un servidor de ustedes se negó a bajar a la placita porque, por miedo a la complexión que la naturaleza me dio, me llamaran “ torero cigüeño “……Allí la chavalería sí que dio buenas muestras de valor, ante los ojos de gentes carlistas de todas las edades. Un torero local deleitónos con un amigo suyo natural de Hispanoamérica que también atrevióse a hacer sus pinitos. Y el que me sorprendió mucho fue Enrique Izquierdo, hijo del Reino de Valencia……¡ Qué valentía y qué buenas maneras !
Defendamos y revindiquemos la tauromaquia como nuestro más íntimo patrimonio. Que no nos de vergüenza que a los españoles se nos asocie a la figura del torero, ni a la bota de vino. Ojalá en las Españas hubiera más casticismo, más charangas y panderetas, y menos discotecas de reguetón y McDollars. No echemos cuenta de los eunucoides aburguesados que se avergüenzan de lo suyo; ni de los hijos del $i$tema que defienden los postulados del Grupo Bilderberger. Admiremos el valor del torero en el albero y sus gestos íntimos. Admiremos tanto al que fabrica el tremendismo hasta el más meticuloso artista clásico. Ahí están Jesulín de Ubrique, Manuel Díaz el Cordobés, Morante de la Puebla, los Rivera Ordóñez, Finito de Córdoba, Canales Rivera, el Califa, El Juli, Juan José Padilla, Enrique Ponce, Óscar Higares, Víctor Puerto, el Cid Alejandro Da Silva, Fernández Pineda, Andy Cartagena, el Fandi, Pepín Liria, Sebastián Palomo Linares( hijo ), Espartaco, Ortega Cano, Eduardo Gallo, Miguel Báez el Litri, Ángel Peralta, los Domecq, Matías Tejela, Alejandro Talavante, Fermín Bohórquez, Miguel Ángel Perera, Andrés Amador, Ángel Teruel, Pedro Hermoso de Mendoza, Antonio Ferrera, José María Manzanares, César Jiménez, Esplá, Manuel Amador, Sebastián Castella, Serranito, Uceda Leal, Salvador Cortés, Martín Pareja-Obregón, y qué sé los que me dejo……Como ven, hay muchos que son naturales de los Reinos Andaluces. Y ahí está la Semana Grande Donostiarra, San Isidro en Madrid, la Feria de Abril de Sevilla, las Colombinas de Huelva, San Fermín en Pamplona, Barrancos en el Alemtejo…… Es una labor de las muchas que tenemos por delante los tradicionalistas. Y acá en el Sur, comprender la íntima ligazón que siempre tuvo con el flamenco; cosa que se ha extendido, comprensiblemente, a nivel nacional. Y con la copla.
Aquellos que oíamos de nuestros mayores las leyendas de Joselito el Gallo, Manolete, el Litri ( Padre ) o Belmonte; aquellos que hemos visto los últimos años de Curro Romero o algún anfibio salto de Manuel Benítez el Cordobés; aquellos que hemos escuchado las excelencias del rondeño ( Y franquista ) Antonio Ordóñez; y que aún nos acordamos de Vítor Mendes……Y a esto me viene a la mente un mediocre artículo que escribió Alfonsito Ussía ( Nieto del insigne dramaturgo Pedro Muñoz Seca, natural del Puerto de Santamaría y que fuera asesinado por la furia roja. De él no se acuerda la “ memoria histórica “ de ZP……Como tampoco se acuerda de los revolucionarios asturianos a los que su abuelo, como militar defensor del supuesto orden de la II República, mató……), un “ monárquico “ liberal cuyas orejas se asemejan a dos tostadas rocieras y que agrandan todas las dimensiones que pudiere ofrecernos una revista de conejos; y que cuando sonríe nos obsequia con su cara de bobo. Escribía sobre los gustos de Antonio Ordóñez y lo enlazaba con la tauromaquia en la América Hispana. Nuestro paisanaje extendió tan fuerte tradición por los pagos del Nuevo Mundo. A día de hoy, apenas se conoce en la Argentina, pero sí que mantiene mucha difusión en amplias áreas del Perú y de la Nueva España. Bien, se refería Ussía a la linda forma que tienen de hablar el castellano los hijos de la Nueva Granada. Y se refería a los gustos del Maestro Antonio Ordóñez ( Que fuera padre de dos auténticos putones verbeneros y mediáticos ) por César Rincón. “ El colombiano, el colombiano, qué bien torea, ese es el mejor……” ; dice Ussía que dejó dicho el Maestro de Ronda. Como los asiduos taurinos admiraban al Morenito de Maracay, al Glisón y a tantos otros que desde la Monumental de México hasta Quito, Santa Fe de Bogotá y Lima sentaron cátedra. Y no pocos de ellos, saliendo a hombros en la Maestranza de Sevilla o en las Ventas de Madrid. Hoy tenemos gratos ejemplos como Luis Bolívar…
Escribir sobre este tema me recuerda, asimismo, a mi amigo Pepe Luis Blázquez, compañero de colegio, con quien tan buenos ratos he pasado. Hace tiempo que no sé de él y aprovecho para mandarle un abrazo donde quiera que esté. Como al que fue nuestro compañero de clase, Álvaro Muñoz. Y ello no me trae evocaciones sólo del rejoneo, sino también de bellísimas estampas como son las carreras de caballos que se hacen en las playas de Sanlúcar de Barrameda.
Lo que particularmente me niego a defender es una cosa que me parece poco menos que horrenda. Y es que la mujer sea “ torera “; sea Ángela, Cristina Sánchez, o quien quiera que sea. No es por “ machismo “ ni nada de eso, ni niego los ovarios que tiene que tener una fémina para ponerse delante de un toro. Pero para torear hace falta una vigorosa fuerza que enlaza en esos remates, que normalmente las mujeres no tienen. Amén de que el traje de luces no es precisamente femenino.
El toro es un símbolo racial y cultural del hispanismo. Podemos incluso ampliar más la simbología remontándonos a la Historia de la Antigüedad. Pero lo que me parece deprimente ( Aunque “ lógico “……) es que el toro sólo pueda figurar si está registrado por Osborne. No tengo animosidad negativa-personal hacia Osborne, pero que entiendo que el toro es un símbolo no ya sólo de las antiguas carreteras, sino de las entrañas etnoculturales más profundas. ¿ Hay un símbolo mejor para la cultura popular hispánica que San Fermín en el Reino de Navarra……? Y que ello sea una marca registrada me parece una atrocidad intrínseca al inhumano democapitalismo.
Dios mío de mi alma, ¿ y qué me dicen ustedes de los valientes perros que custodian las manadas ? De esos podencos, de esos mastines, de hasta esos galgos, de esos perros de agua……En Utrera había uno que utilizaba bull-dogs, según me dijeron hace tiempo. ¡ Qué bellas estampas las camperas, con esos caballos montados por altaneros jinetes, con sombreros cordobeses o boinas ! ¿ Qué me dicen ustedes de los clarines y de las cornetas; y de los pasodobles ? Igual no suena tan sofisticada una taberna con sillitas de nea, unos pueblos blancos, unas mecedoras, que un snack-bar, el amasijo de hierro y cristal que llaman rascacielos y toda la pseudoarquitectura “ moderna “, los graffitis, el burger o el béisbol……Por eso precisamente me siento orgulloso de ser español, y no me importa proclamarlo a los cuatro vientos, contra el Yankee Way of Life y demás miserias. Curiosamente son muchos extranjeros los que se quedan prendados de nuestras características etnoculturales desde siempre. Pero aquí, siempre agachando la cabeza y promoviendo leyendas negras……
¡¡¡ QUÉ VIVAN POR SIEMPRE NUESTRAS TRADICIONES, Y POR ENDE, LA TAUROMAQUIA !!!
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