A ver, el texto está en el catalán que se habla en la Litera, no en aragonés; lo que ocurre es que la Federación de Asociaciones Culturales del Aragón Oriental no admite que ellos hablen catalan y dicen que su lengua debería denominarse "aragonés oriental" (aunque en filología se reserva el nombre "aragonés" para los dialectos hablados hoy en día en algunas zonas del alto Aragón). La cuestión es básicamente política. Temen que si se dice que ellos hablan catalán pasen a ser parte de la mentira de los Països Catalans. Desde el punto de vista puramente filológico, la lengua surge en esa zona directamente del latín, en ello se basan para rechazar la integración de sus variedades en el catalán normativo. Temen, además, que ese catalán normativo acabe con sus peculiaridades.