Búsqueda avanzada de temas en el foro

Resultados 1 al 19 de 19

Tema: De requeté del terç de la Mare de Déu de Montserrat a independentista

Vista híbrida

  1. #1
    Avatar de MADERA
    MADERA está desconectado Miembro graduado
    Fecha de ingreso
    14 nov, 09
    Mensajes
    170
    Post Thanks / Like

    Respuesta: De requeté del terç de la Mare de Déu de Montserrat a independentista

    @Der

    Me parece muy acertado lo que dices de "la penetración en España de las falsedades del romanticismo decimonónico", cuando lo he leido en seguida me ha venido a la cabeza todo aquello de la Renaixença.

    Por otro lado la polémica de Cataluña como nación, quizás tenga más de lingüístico que cualquier otra cosa.

    Pero quiero defenderme diciendo que al referirme a Cataluña como nación, me refería básicamente a ese sentido que le da Enric Prat de la Riba en la cita que se ha puesto en el post adherido un poco más arriba titulado "CATALANITAT ÉS HISPANITAT":

    "...Així, el nacionalisme català, que mai ha estat separatista, que sempre ha sentit la unió fraternal de les nacionalitats ibériques dins de l'organització federativa..."
    "...és hora de treballar per reunir a tots el pobles ibérics, desde Lisboa a Ródano, dins d'un sol Estat, d'un sol Imperi, i així les nacionalitats espanyoles renaixents sabran fer trionfar aquest ideal..."
    Enric Prat de la Riba. La Nacionalitat Catalana, 1906.




    un sentido que para nada pretende ser separatista.

  2. #2
    Antonio Hernández Pé está desconectado Miembro Respetado
    Fecha de ingreso
    10 mar, 07
    Mensajes
    562
    Post Thanks / Like

    Respuesta: De requeté del terç de la Mare de Déu de Montserrat a independentista

    El separatismo catalán no tiene tradición alguna y es de bastante reciente invención. Ni a Prat de la Riba ni a muchos otros eminentes intelectuales catalanes se les pasaba por la cabeza no sentirse parte de España. Entiendo y comparto lo que dices, amigo Madera.

  3. #3
    Avatar de Villores
    Villores está desconectado Miembro graduado
    Fecha de ingreso
    03 dic, 05
    Mensajes
    940
    Post Thanks / Like

    Respuesta: De requeté del terç de la Mare de Déu de Montserrat a independentista

    En el carlismo siempre ha habido una cierta tendencia a fraccionar el ideario, dependiendo de las circunstancias políticas. Las propias jerarquías de la Comunión en cierto modo lo han hecho dependiendo del aludido momento político, poniendo en cosas un mayor acento en Dios, la Patria, los Fueros o el Rey. En el caso del pueblo carlista con más razón, donde cada persona tiene unos impulsos, un temperamento o un razonamiento distinto... o mejor dicho la falta de un recto razonamiento que puede acabar confundiendo, pues no todo el mundo es inteligente y desde luego nadie es perfecto, poniendo el acento en los circunstancial, hasta exaltarlo exclusivamente dando lugar al rechazo de otras partes del ideario. Sin embargo fenómenos como el aludido en el ejemplo reciente no son más que anécdotas marginales.

  4. #4
    Avatar de Der
    Der
    Der está desconectado Miembro graduado
    Fecha de ingreso
    13 dic, 08
    Ubicación
    Donde cuadre
    Mensajes
    106
    Post Thanks / Like

    Respuesta: De requeté del terç de la Mare de Déu de Montserrat a independentista

    Cita Iniciado por Antonio Hernández Pé Ver mensaje
    El tema de este hilo se ha desviado bastante derivando hacia otro campo. Por esta razón no me parece oportuno seguir debatiendo aquí sobre el concepto de "nación".
    Por otra parte, es este un tema muy, pero que muy delicado porque toca fibras muy íntimas ya que muchos tienen al respecto ideas preconcebidas a las que se aferran como si fueran dogmas teológicos. Ya he tenido expriencias muy desagradables en otros foros que han acabado como "el rosario de la aurora" cuando se ha discutido sobre este asunto.
    Hispanismo es para mí un foro muy serio y uno de los más respetables que conozco y no quiero ser yo el que inicie o mantenga una polémica que pueda perturbar su buena marcha y la cordial fraternidad que se nota, en líneas generales, entre los principales intervinientes. Ruego que no se tome esto como una actitud escapista. Nunca ha sido mi postura huir de los problemas o no enfrentarme a ellos, pero sí mantengo la actitud de no crearlos ni menos fomentarlos.
    Sr. Antonio me hago a una idea del tipo de foros a los que hace referencia, le diré que hace no mucho mismo yo los solía frecuentar, y he de decir que la notoriedad de los mismos ha sido ganada a pulso; entre otras cosas por la escasa seriedad y absurdidad del discurso que se traen y también por el abundante tiempo que ocupan las discusiones bizantinas en los mismos, yo diría que prácticamente todo el tiempo.

    Dicho esto mi intención no era desencadenar una discusión bizantina, no pretendía que nos pusiéramos a debatir sobre si España es una nación o no, ni si Catalunya, Galicia o cualquier otra comunidad son naciones o no, creo que está bastante claro que no lo son.

    No obstante de lo que no todo el mundo se percata, y por eso creo conveniente señalarlo, es que la idea de una nación catalana, gallega o vasca surge a raíz de la llegada a estas tierras de ideas extrañas, provenientes de Centroeuropa. Recuerdo que no es posible la existencia del separatismo sin la previa existencia de una nación o de una presunta nación o presuntas naciones como es el caso que nos concierna, y aquí es donde se haya el problema.

    Pues resulta que todos los que hasta ahora han defendido la existencia de las presuntas “naciones” vasca, gallega y catalana lo han hecho ciñéndose a la definición – idea - romántica de nación, en definitiva apoyándose en conceptos que son tan extraños a esta tierra como el liberalismo ó el socialismo y por ello dignos de nula consideración.

    Recibe un cordial saludo.

    Cita Iniciado por MADERA Ver mensaje
    Pero quiero defenderme diciendo que al referirme a Cataluña como nación, me refería básicamente a ese sentido que le da Enric Prat de la Riba en la cita que se ha puesto en el post adherido un poco más arriba titulado "CATALANITAT ÉS HISPANITAT":

    "...Així, el nacionalisme català, que mai ha estat separatista, que sempre ha sentit la unió fraternal de les nacionalitats ibériques dins de l'organització federativa..."
    "...és hora de treballar per reunir a tots el pobles ibérics, desde Lisboa a Ródano, dins d'un sol Estat, d'un sol Imperi, i així les nacionalitats espanyoles renaixents sabran fer trionfar aquest ideal..."
    Enric Prat de la Riba. La Nacionalitat Catalana, 1906.


    un sentido que para nada pretende ser separatista.
    Enric Prat de la Ribay no era separatista, era un hombre de buena fe, pero algo miope, debido a la influencia del romanticismo. Y lo de miope no lo digo en modo despectivo, pues otros ni siquiera llegaron a ver, no obstante su buena fe no excusa que nosotros no tratemos de mejorar y de corregir la miopía que el romanticismo les causo a gente como a el y a otros como Vicente Risco.

    Saludos!
    El francés es la lengua de nuestro enemigo cristiano y tienes que aprenderlo, el latín y el griego son las lenguas de Dios y nos habla en ellas a través de su Santa Iglesia, con el Turco solo hablamos con la espada, y ese idioma ya lo estas aprendiendo.

    Luís de Quijada a Jeromin

  5. #5
    Avatar de Villores
    Villores está desconectado Miembro graduado
    Fecha de ingreso
    03 dic, 05
    Mensajes
    940
    Post Thanks / Like

    Respuesta: De requeté del terç de la Mare de Déu de Montserrat a independentista

    Cita Iniciado por Villores Ver mensaje
    En el carlismo siempre ha habido una cierta tendencia a fraccionar el ideario, dependiendo de las circunstancias políticas. Las propias jerarquías de la Comunión en cierto modo lo han hecho dependiendo del aludido momento político, poniendo en cosas un mayor acento en Dios, la Patria, los Fueros o el Rey. En el caso del pueblo carlista con más razón, donde cada persona tiene unos impulsos, un temperamento o un razonamiento distinto... o mejor dicho la falta de un recto razonamiento que puede acabar confundiendo, pues no todo el mundo es inteligente y desde luego nadie es perfecto, poniendo el acento en los circunstancial, hasta exaltarlo exclusivamente dando lugar al rechazo de otras partes del ideario. Sin embargo fenómenos como el aludido en el ejemplo reciente no son más que anécdotas marginales.
    En relación con lo que he señalado la Comunión Tradicionalista tiene este interesantísimo manifiesto con ocasión del acto nacional del Cerro de los Ángeles 2003 en que señala la necesidad del carácter íntegro y unitario del ideario carlista frente a particularismos que acaban en desviaciones, como el caso que comentamos. El manifiesto es el siguiente:

    CARLISMO Y UNIDAD
    El lema que hemos elegido este año para la celebración del acto nacional que la Comunión Tradicionalista celebra, organizado por los círculos carlistas –el de San Mateo a la cabeza– con motivo de la festividad litúrgica de Cristo Rey, en el Cerro de los Ángeles, símbolo de las promesas del Reinado Social de Nuestro Señor Jesucristo, tiene un significado más hondo del que la primera lectura pudiera indicar.
    Carlismo y unidad evoca, sí, la conveniencia de reagrupamiento de las fuerzas –por más que hoy estén menguadas respecto de las de otros momentos– que se tienen por carlistas. Pero no es el mensaje más importante. Esa unidad, para tener valor, debe venir precedida de no pocos esclarecimientos y seguida de no menos rigor.
    Lo que, en un primer momento, quiere significar el lema es la necesidad de recuperación del carácter unitario, íntegro, del Carlismo como fenómeno histórico y político. La fragmentación que acompañó a la crisis de la Cristiandad no ha dejado de producir frutos de escisión, unilateralidad, parcialidad. El Carlismo, como custodio del espíritu de Cruzada de la vieja Cristiandad prolongada en las Españas, es una bandera dinástica, una continuidad histórica y una doctrina cabalmente tradicionalista. La bandera dinástica es el legitimismo, del que el Carlismo no puede abjurar y del que tampoco puede prescindir sin dejar de ser Carlismo. La continuidad histórica es la de las Españas como Cristiandad menor: sin el Carlismo el ser histórico de España habría perecido por la Revolución liberal, de modo que la supervivencia de un modo de ser, el de los pueblos hispánicos, ha sido preservado por el Carlismo. Y la doctrina tradicionalista no es una ideología, esto es, no es una pura asunción arbitraria e infundada ajena a la naturaleza de las cosas: es una doctrina que busca dar razón de las cosas.
    Cuando los elementos anteriores, forjados esforzadamente hasta componer una realidad indestructible, se escinden o se toman separadamente, el Carlismo como unidad desaparece. Eso pasa cuando se olvida el legitimismo, cuando se deja de lado la vinculación con la continuidad histórica hispánica o cuando se cede en algún punto del ideario tradicionalista, aunque fuere a título de "hipótesis", para aceptar las tácticas o los principios de la ideología, esto es de la Revolución: sea ésta liberal, conservadora, socialista o fascista. Esto es lo que acontece en buena parte de las fuerzas que se dicen hoy carlistas. Que han caído, por poner variados ejemplos, en el agnosticismo dinástico, la fragmentación del ideario (la absolutivización y desnaturalización del foralismo, o el delirio socialista autogestionario, entre otras) y la táctica democristiana de los "católicos en la vida pública".
    Así pues, por el contrario, la proclamación de un Abanderado, el tejido de una hermandad cada vez más estrecha con todos los pueblos de la Hispanidad y el cultivo de un tradicionalismo purísimo (que toca a todas las esferas de la vida, a comenzar con la consideración de la crisis contemporánea de la Iglesia, y la venerable tradición litúrgica, hasta llegar a los menores detalles de la constitución política y social), militan en la mejor y más eficaz edificación del Carlismo.
    Todavía, en un segundo lugar, cabe encontrar en el lema Carlismo y unidad una lección de esperanza. El Carlismo, en cuanto crisol de la tradición política hispánica, si es fiel a sí mismo se convierte en instrumento (por modesto e imperfecto que se quiera) del Reinado Social de Nuestro Señor Jesucristo. De ahí que haya de ser, como su Divino y Único Maestro, "signo de contradicción". Y que, en cuanto la coyuntura lo permita, concite en su torno los anhelos políticos de los católicos, tanto como el rechazo de los revolucionarios. En tal sentido, la perseverancia en la lealtad de la Causa lo es en el servicio de Dios. Y no admite desmayos o cesiones. Un servicio, además, alejado de las tácticas humanas, y ajeno a cualquier cálculo o ventaja, sino por los medios que Dios quiere. He ahí un camino para nuestra perfección personal y para el bien de nuestros pueblos.

  6. #6
    Antonio Hernández Pé está desconectado Miembro Respetado
    Fecha de ingreso
    10 mar, 07
    Mensajes
    562
    Post Thanks / Like

    Respuesta: De requeté del terç de la Mare de Déu de Montserrat a independentista

    Bueno, mi enhorabuena por un manifiesto tan claro y coherente. ¡A ver si da fruto!

Información de tema

Usuarios viendo este tema

Actualmente hay 1 usuarios viendo este tema. (0 miembros y 1 visitantes)

Temas similares

  1. El liberalismo es pecado
    Por Ordóñez en el foro Política y Sociedad
    Respuestas: 80
    Último mensaje: 21/07/2022, 19:55
  2. Sobre Julius Evola
    Por Ordóñez en el foro Historiografía y Bibliografía
    Respuestas: 2
    Último mensaje: 10/11/2018, 13:42
  3. Spe Salvi
    Por Hyeronimus en el foro Religión
    Respuestas: 3
    Último mensaje: 04/12/2007, 10:40
  4. Respuestas: 0
    Último mensaje: 31/08/2007, 02:36
  5. La política y el orden de la convivencia, de Rubén Calderón Bouchet
    Por Ordóñez en el foro Política y Sociedad
    Respuestas: 0
    Último mensaje: 16/07/2007, 19:48

Permisos de publicación

  • No puedes crear nuevos temas
  • No puedes responder temas
  • No puedes subir archivos adjuntos
  • No puedes editar tus mensajes
  •