Cita Iniciado por TOMÁS MORO Ver mensaje
El hombre occidental ,libre gracias al Cristianismo ,ha ido evolucionando tanto en la forma de ver el mundo como en la estructuras de poder . Hoy el triunfo del sistema democrático nos acerca más hacia esa utopía en la que confía el cristiano que podríamos definir como la ciudad de Dios o la Nueva Jerusalén . Son palabras como ; libertad ,igualdad y fraternidad las que podrían definir los principios y postulados de ese nuevo mundo que se vislumbra en nuestra esperanza ,y esas palabras son netamente cristianas. Pero ,¿acaso nuestros enemigos que son los enemigos del hombre no son conscientes de ello ?. Por ello esas palabras han sido desvirtuadas y manipuladas ,intentando vaciarlas de significado .¿Ello debe impedirnos usarlas ? En absoluto ,somos nosotros los que las hemos incorporado al mundo en su verdadero sentido,y debemos ser nosotros quienes en lucha constante contra el mal y sus secuaces debemos devolverles su verdadero significado . Ser Cristiano implica formar parte de una guerra ,que existe desde el principio de la creación del hombre . " No le serviré" ,esa fue la frase que desencadeno el conflicto . Un conflicto donde al hombre le es imposible ser neutral ,pues es nuestro destino lo que se encuentra en juego. .
Hablas el típico discurso progre postconciliar, de una Iglesia-ficción que fue siempre más demócrata y liberal que nadie: La Nueva Iglesia fundada en el vaticano II en 1962, travestida de progre, amiga de masones y comunistas, renegadora de su pasado y mentirosa, que se endilga para ella misma los piropos democrata-igualitarios-libres-antiopresores etc. que los masones y demás canalla tienen a gala de lucir.

Primero. Alabas la democracia MODERNA siguiendo a los curas progres y mentirosos, PERO la Iglesia jamás movió antiguamente un dedo para establecerla y los papas siempre defendieron las monarquías y el PODER ABSOLUTO DE LOS MONARCAS y condenaron excatedra el liberalismo y la masonería que están en la base de la democracia moderna?

Segundo. No hay ninguna cita bíblica, encíclica papal o de catecismo, anteriores a la Revolución Francesa de 1789 ni aun después en siglos, que mencione nada de ese trío libertad-igualdad-fraternidad.Y una por una, Y SIN DIOS, jamás han significado nada de nada para la doctrina católica.
Ni jamás ningún papa ANTIGUO dijo nada de que esos tres principios se hubieran usurpado a la Iglesia.

Aquí los que "desvirtuan y manipulan " la historia de la Iglesia todos sabemos quien son.