Sí. Había leído sobre ello. Se hacía en Sevilla. Y se exportaba dentro y fuera de la península.
Estaba ironizando.
Y el confesor y consejero de Isabel, la reina, le reprendía por su exceso en su higiene. Por lo tanto: De sucia nada.
Esos tiempos por recomendaciones médicas (dentro de los conocimientos que se tenían en la época) Y por las del Clero
(Que no veía correcta la desnudez); pues....era lo que "se hacía".
Pero esto no puede ni debe ser arrojadizo en forma de reproche, como hacen detractores, por más que no fuesen unos adelantados en este aspecto. Hay más luces que sombras en la Edad Media y Renacimiento de la península.
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