Estimado Valmadian,
efectivamente... la Iglesia Católica es un verdadero "chollazo" para las arcas públicas. Y siempre está ahí, con su amor y su servicio desinteresado, para aportar a las personas (y por ende, a toda la sociedad) su ayuda impagable en dinero... Los políticastros del sistema parlamentario son todos una mierda, empezando por los del PP y terminando por los del PSOE, o viceversa... (y cerrando el arco político con toda esa escoria separatista que existe en algunas de las regiones periféricas que tiene nuestra geografía). Y lo mismo sucede, como tu muy bien has apuntado expresamente, con los sindicalistas y demás chusma, porque no acabaría ahí la lista de exentos que no deberían serlo...
He resaltado tu pregunta final, porque me parece muy significativa de la situación en que vivimos en España. Y también, porque creo conocer la respuesta: Rubalcaba no llevó a cabo este despropósito, cuando él y su banda estaban en el gobierno, sencillamente porque era mejor esperar a que llegaran sus cómplices del Partido Popular a levantar la liebre (como muy bien hicieron algunos de los ínclitos alcaldes peperos, encabezados por la señora alcaldesa de Zamora, la muy liberal Rosa María Valdeón, por poner un ejemplo bien concreto de lo que digo).
Porque, con el PP y el PSOE pasa lo mismo que siempre ha ocurrido con el comunismo (también llamado "socialismo real") y el capitalismo fruto del liberalismo, que ambos no son mas que dos caras de una misma moneda, una hidra con dos cabezas en falsa disputa o los muñecos de un guiñol de pueblo dirigido por un único titiritero que entretiene a los niños. Además de ser unos malos pastores, perversamente falsos... cuya única misión es apacentar y entretener con falsas disputas y politiquería, cada cual a sus propias ovejas, mientras observan cómo vienen los lobos dispuestos a comérselas (en espera de parte de la merienda que a ellos siempre les dejan...).
A ver si la Iglesia Católica española despierta y comienza a ver, de una vez por todas, la cara de aquellos que son sus verdaderos enemigos...
Un abrazo en Cristo
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