Los sedevacantistas creen que la sede está vacante, es decir, que los últimos papas no han sido legítimos. Ante la debacle causada por el Concilio Vaticano II, han llegado a la conclusión de que los papas que han reinado desde entonces son herejes, y por tanto antipapas. Su postura es errónea, pero yo los miro con bastante caridad porque lo que creen lo creen de buena fe, motivados precisamente por su amor a la Iglesia y por la preocupación de ver lo que ha pasado. En cuanto a los mal llamados lefebvristas, siempre han reconocido a los pontífices como tales. Tienen la foto del papa reinante, actualmente Benedicto XVI, en sus sedes y sus páginas de internet, y rezan por el Papa todos los días. No solo eso; los que se van a ordenar sacerdotes tienen que firmar una declaración aceptando al Papa y comprometiéndose a rezar públicamente por él.
Siento no poder facilitarle un teléfono de la FSSPX.
Un saludo en Cristo Rey
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