El gobierno de Brasil expulsa a los indios en la inauguración del nuevo Maracaná
La fuerte represión contra los indígenas empaña la inauguración del principal estadio de fútbol
EFE
Un indio protesta frente a la policía durante el desalojo de ocho indígenas en el antiguo Museo del Indio
La
reinauguración del principal estadio del Mundial 2016, el famoso Maracanã, será marcada por una gran fiesta de carnaval, al mejor estilo carioca, para las autoridades de la FIFA, el gobernador de Río, Sergio Cabral, la presidenta Dilma Rousseff y sus invitados, pero no para los indios que vivían allí.
Fuera del monumento del fútbol una gran fuerza policial evita que lleguen a sus cercanías grupos de activistas e indios que vivían en la región, que protestan contra su desalojo del Museo del Indio, que se encuentra en el área, y contra la privatización del estadio más importante de Brasil. Curiosamente, la palabra Maracanã, es una palabra indígena tupi guaraní, que significa «ave solemne», pero para los indios, no habrá ninguna solemnidad.
Un día antes de la gran fiesta, cerca de 100 Policías Militares y miembros del ostensivo Batallón de Choque (BOPE), tradicionalmente empleado para enfrentar peligrosos narcotraficantes,
cercaron el área para retirar a los indios y manifestantes que se resistían a dejar el local. Helicópteros sobrevuelan la región para evitar que nada empañe la inauguración, especialmente los indios.
Ocho indios y un bebé
Un grupo de 8 indios, entre ellos un bebé, que volvieron a ocupar el Museo del Indio, de donde fueron desalojados hace un mes, fueron
llevados a la comisaría, detenidos por dos horas y acusados de ocupación de domicilio. La policía enfrentó a los indios que protestaban en la calle con gas pimienta.
Después del último enfrentamiento, tras meses de resistencia, los indios fueron transferidos por el gobierno de Río a un área en Jacarepaguá, a más de 25 kilómetros de distancia, donde viven en contenedores metálicos, en un área en que décadas atrás eran enviados los enfermos de lepra. «Estamos sintiéndonos aislados», declaró el vice cacique Guarapirá Pataxó, a la estatal TV Brasil.
Las autoridades de Río explican que 4 millones de personas, la población que circula en la ciudad en la hora punta, pueden ser perjudicadas por la acción de los ‘invasores’. «Son parte de un grupo de manifestantes.
Necesitábamos preservar su vida. Es una acción técnica que necesita esa cantidad de policías», explicó Ivan Blaz, relaciones públicas del BOPE.
Partido inaugural
El Maracanã será inaugurado con un partido entre los amigos Ronaldo Nazario y de Bebeto, organizado para las familias de quienes lo reformaron.
Entre las autoridades el gobernador Cabral, apuntado por los manifestantes como el principal enemigo. Ya los indios, los primeros hombres del territorio brasileño, no pueden participar ni fuera del estadio.
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