Un amigo indonesio me comentaba alucinando sobre el carácter español de los filipinos. Sus siestas, sus fiestas, flirteos... Me describía el carácter serio y silencioso que suelen tener los asiáticos, algo que no tienen los filipinos en absoluto.
Le chocaba mucho la forma de ser y de hacer de sus compañeros españoles e hispanoamericanos en Pamplona, Navarra, España, en la Universidad de Navarra. La biblioteca no era el sitio para estudiar, sino para encontrar pareja. La víspera del examen salían de marcha, llegando a las tantas a dormir y encima les salía bien.
En cuanto a Timor Oriental, me imagino que el dominio indonesio no habrá hecho mella en su carácter luso y cristiano. No sé si hay alguien con conocimientos al respecto.
Países lusitánicos como Timor Oriental, Angola, Cabo Verde, Mozambique, Santo Tomé y Príncipe, Guinea Bissau, Damao, Diu, Goa y Macao deberían estar como miembros de pleno derecho. Andorra creo que ya forma parte de esta asociación.
Belice también debería unirse, además de estar entre México y Guatemala, países hispanohablantes, tiene una mayoría de hispanohablantes en su seno. Eso sí habrá apoyar para que la lengua más utilizada de facto se convierta en cooficial con el inglés que es la oficial. Lo mismo que en EEUU, no se trata de sustituir al inglés por el español, sino de añadir el español al inglés. Quitar el inglés no sería lógico. Insisto en que no se trata de restar, sino de sumar.
La Francophonie tiene miembros que son parte de otros Estados soberanos como Quebecq. ¿No podríamos hacer lo mismo con estados o ciudades de mayoría hispana? Nuevo México tuvo mayoría hispana hasta principios del pasado siglo. Y la está readquiriendo de nuevo.
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