Es rara la serie TV donde no sale un homosexual de relleno, cuando no son los protagonistas, empieza a resultar original no ver a ninguno. Y ya no hablemos de los programas del “corazón” basuras, allí como no esté uno hablando de la Pantoja, o el Muñoz ese, como que falta algo. En estos días de “modelnidad” ser homosexual parece que es algo que queda muy bien en el currículum, si quieres trabajar en la televisión.