Muy bueno, creo que ya lo había leído.Hay alguna cosilla con un ligero sesgo anticastellano...peligroso.Pero poca cosa:

Las relaciones entre unos y otros no debían de ser muy cordiales, ya que Fernando IV justifica la separación “por evitar peleas y reyertas que pudieran ocurrir”.
También se reunían por separado, aunque se celebraban en la misma localidad, las cortes de la Corona de Aragón.De todos modos yo no me recrearía mucho en las malas relaciones entre españoles, no sé qué complacencia puede haber en ello.Por otro lado, los grandes magnates no necesitaban mucho para tener peleas y reyertas entre sí, y la celebración de Cortes se prestaba mucho a ello...

Pero, por desgracia, la vía de la pluralidad fracasó, ya que a mediados del
siglo XIV se impuso el rodillo castellano, y a partir de entonces las leyes serán las mismas para todos los reinos.
Interpretar el que las leyes fueran las mismas para todos los reinos como un 'rodillo castellano' me parece tendencioso y malintencionado.Un truco lingüístico.Lo que se impuso fue esa tendencia al reforzamiento de la autoridad real que se adivinaba ya en algunos lugares de Europa occidental y que, con grandes altibajos, continuaría hasta terminar degenerando en muchos lugares en el absolutismo monárquico.

Tanto se puede escribir 'se impuso el rodillo castellano, y a partir de entonces las leyes serán las mismas para todos los reinos' como 'se impuso el rodillo leonés, y a partir de entonces las leyes serán las mismas para todos los reinos'.El único rodillo sería en todo caso el de la uniformización, no el castellano.Eso es absurdo.Y eso si no aceptamos que son necesarias en bastantes aspectos leyes que sean comunes en una Corona.Y esto no es centralismo.Remito para que se entienda a lo que me refiero al manifiesto de Loredán de SMC D. Carlos VII QEPD, que se puede encontrar en este foro.

Los mapas anteriores a la segunda mitad del siglo XVII constriñen el reino a la actual provincia de León, y la mitad norte de Zamora, mientras que a partir de esa fecha prácticamente todos lo extenderán a Salamanca, Zamora, León, y la mitad occidental de las provincias de Valladolid y Palencia. Aunque que la división provincial de 1833 dejaba al margen a estas últimas dos provincias, en muchos de los mapas del siglo XIX continúan apareciendo.
Nada que añadir, sólo que creo que es evidente que esto:

Los mapas anteriores a la segunda mitad del siglo XVII constriñen el reino a la actual provincia de León, y la mitad norte de Zamora
era debido a que por aquella época se identificaba León con el Adelantamiento, en mi opinión.