Es verdad, amigo Gothico: el aflojamiento es tal, que ya ni siquiera los curitas u obispos viejos, de quienes pudiera esperarse hubieran guardado las formas de antaño, atinan a recordar a los feligreses la importancia del ayuno. Solo alguna tibia rememoración (como diciendo: si queréis, si no os trastoca los planes que tenéis para el fin de semana, ayunad) echada al voleo antes de la misa o al terminar ésta.
Algunos salen con burradas casi heréticas te diría, tales como: bueno, si no quieres ayunar, pues prívate de algo que te guste mucho, por ejemplo, no fumes en este día. No comas helados.
Lo más patético de todo esto es que luego de hacer lo que se les da la gana con la misa, con su vida sin ejemplos para los que pudieran tener vocación o para los que estuvieran volviendo a la iglesia despues de un tiempo, al final de la misa exhortan a rezar por que el Señor mande obreros, orar para que mande vocaciones!!.