Puede que tu aun me contestes. Otros ya no se dignan ni a hacerlo. Ellos sabrán que mueve sus corazones.

Pese a tu buena predisposición, tus comentarios no son los de alguien que crea en la palabra. O por lo menos... no en la palabra dada por los hombres.
¿Crees en el honor? ¿En la palabra dada? ¿En el prestigio o el respeto fuera de la fe?

En un mundo perfecto el único soberano seria Dios. No es así y hay que buscar un substituto para tomar las decisiones mas mundanas.



Este mundo gira entorno a una gran verdad.
Nadie elige su destino. Un rey puede mover un hombre. Un padre reclamar a su hijo. Pero has olvidado que aunque aquellos que te mueven sean hombres con poder o reyes tu seguirás siendo el único responsable de tu alma y de como decidas vivir la vida.
Cuando comparezcas ante Dios no podrás decir que otros fueron dueños de tus actos o que la virtud no era oportuna en ese momento. Eso no es suficiente.

La corrupción en el mundo es anterior a la ilustración.
Si la democracia falla, significara que nosotros habremos fallado. Que el sistema no puede ser respaldado por el saber o la razón y que la única forma de que sea duradero y unánime es haciendo un uso brutal de la fuerza.

Lo que es una muy mala noticia para los tiempos que corren.
Tenemos tantos explosivos como para no dejar rastro de que una vez fuimos y existimos.

Si estas palabras os suenan incompresibles o extrañas, entonces no hay mucho de lo que debamos hablar.