Déjese de filosofías que de ellas junto con los juegos matemáticos salen todos los años modelos elegantes en Cosmología. Hipótesis que no se cumple ninguna en cuanto que no se basan en experiencias ni directas ni posibles. La que más de moda está recientemente es la "platónica" que especula acerca de si el Universo es una especie de holograma de otro Universo. La verdad es que se lo pasan de miedo y reconozco que yo también leyéndolos, pues como argumentos son muchísimo más interesantes que la mejor novela de ciencia-ficción.

Pero vayamos si siquiera por un momento a la realidad física, sin filosofías, y pongamos los pies en el suelo. Las órbitas planetarias son elípticas aunque usted se empeñe en decir que no. Y sin entrar en detalles experienciales técnico-matemáticos, al menos por ahora, todo el mundo sabe que la órbita de Plutón se cruza con la de Neptuno. ¿Por qué? porque es elíptica, y tiene una inclinación con respecto a la eclíptica de 17'1º, con una excentricidad de 0'25 (1 = a órbita totalmente circular), distanciándose del Sol 7375 millones de km en el afelio y 4425 millones en el perihelio, mientras, a su vez, su eje de rotación tiene una inclinación de 123º respecto a la vertical por lo que su rotación es retrógrada.

Y esto es sólo un ejemplo. La realidad no está en los cálculos de Copérnico, ni en el heliocentrismo que expuso Galileo, ni en las genialidades de Tycho-Brahe y, ni siquiera en Kepler o en Newton. La realidad es que todo empezó a cambiar cuando el sentido de la vista fue ampliado por la invención del telescopio que permitió un número suficiente de acercamientos que mostraban que todo lo anterior había que revisarlo. Por supuesto, aquellos instrumentos eran paupérrimos y comparados con los que hoy manejamos los amateurs -prescindo de los profesionales porque esa es otra historia- hubiesen dejado mudos de asombro a todos aquellos matemáticos y filósofos. Tengo la más completa convicción de que si Ptolomeo hubiese dispuesto de un instrumento medio de los que hoy cualquiera puede adquirir en un establecimiento especializado, no estaríamos discutiendo aquí de nada acerca de epiciclos y deferentes. Sencillamente, toda su concepción hubiese sido completamente distinta y a él si lo disculpo, pues de lo único que pudo disponer fue de sus ojos, de los cuales tampoco sabemos en qué estado físico estaban, ¿pero hoy en día con los medios que hay? ¡por favor!


Distancias orbitales (j2000.0)

Mercurio: excentricidad de 0'2563

Venus: excentricidad 0'00677

Tierra: excentricidad 0'01671

Marte: excentricidad 0'09341

Júpiter: excentricidad 0'04839

Saturno: excentricidad 0'05415

Urano : excentricidad 0'044727

Neptuno: excentricidad 0'00859


Considerando que el Sol: excentricidad 1.

Por supuesto, las elipses orbitales no son muy exageradas o marcadas como las de los cometas, pero no hay órbitas circulares. Si nos atenemos a la órbita de la propia Luna también podemos observar que entre la distancia máxima o apogeo (406.576 km del pasado 28 de julio a las 4 h) ) y la mínima o perigeo (356.896 km el pasado 10 de agosto a las 18 h de t.u.) hubo una diferencia de 49.680 km. Es decir, claramente elíptica.

FUENTE: datos del Anuario del Real Observatorio de Madrid 2014 Instituto Geográfico Nacional. MINISTERIO DE FOMENTO.

Que es una de las fuentes que manejamos amateurs y profesionales para las observaciones cada año.