No existe una imagen fidedigna de Jesús, es solo una representación del hombre, se le ha representado generalmente con pelo largo ondulado, barba, de cara alargada pero nadie dice que así haya sido. No debemos quedarnos en la imagen, debemos voltear a la persona que representa.

Lo importante no es la imagen, lo importante es que Jesús padeció, murió y resucitó por nosotros y por nuestros pecados.