Bastantes años hace ya que los devaneos de la Vaticueva y de su ocupante me traen al fresco y procuro ni enterarme de ellos, por cuestión de higiene mental.

Simplemente, hacer ver cómo, cuando a ellos les interesa, conmemoran nada menos que las causas de disensión cristiana (¡¡qué mayor ruptura cristiana que la de Lutero!!) contradiciendo el slogan de "unidad de los cristianos" con que nos vienen bombardeando desde hace 60 años. ¿Acaso no debería ser el año de 1517 una fecha para olvidar... según los parámetros del ecumenismo vigente?
Si es que hasta se permiten tomar por tontos a los incondicionales que saben que les ríen y reirán las gracias por los siglos de los siglos amén.