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Tema: Críticas de H. Belloc al Crédito Social (y correspondientes respuestas a las mismas)

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Martin Ant Críticas de H. Belloc al... 05/01/2017, 13:46
Martin Ant Re: Críticas de H. Belloc al... 05/01/2017, 14:36
Martin Ant Re: Críticas de H. Belloc al... 05/01/2017, 14:40
Martin Ant Re: Críticas de H. Belloc al... 05/01/2017, 14:43
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    Críticas de H. Belloc al Crédito Social (y correspondientes respuestas a las mismas)

    A principios de 1919 C. H. Douglas inició su colaboración con el editor A. R. Orage en el en aquel entonces famosísimo semanario británico The New Age, conocido también por los españoles por ser el sitio donde Ramiro de Maeztu publicó muchos de sus más importantes artículos.

    La historia que está detrás de esa publicación, durante el periodo en que Orage se hizo cargo de ella (1907-1922), está marcada por una búsqueda sincera de soluciones a los problemas económico-sociales que, salvadas las diferencias superficiales, ya se manifestaban entonces en términos esencialmente iguales a los de ahora.

    En la primera etapa "oragista" (1907-1913), nos encontramos con los famosos debates entre los distributistas Chesterton y Belloc, por un lado, y los socialistas fabianos G. B. Shaw y H. G. Wells. Hay que destacar que The New Age comenzó siendo apoyada, financiada y fomentada por los socialistas fabianos, pero viendo la deriva editorial que estaba tomando la publicación en favor de las ideas tanto del Distributismo como del Gremialismo Nacional o "National Guilds" (a ésta última, por ejemplo, se adscribía Ramiro de Maeztu), los fabianos se separaron de The New Age, y fundaron en 1913 su propia revista: The New Statesman (la cual, por cierto, todavía sigue en activo más de 100 años después).

    En la segunda etapa "oragista" (1913-1919), nos encontramos con la difusión y manifestación triunfante de las ideas sociales del Distributismo y del Gremialismo Nacional, pero poco a poco se va llegando a un punto muerto que culmina tras la I Guerra Mundial, en donde se constata ciertamente el carácter sano de esas ideas en relación a la insana realidad imperante, pero también la insuficiencia de estas ideas para una efectiva aplicación en la realidad. El elemento que faltaba, y así lo veía el propio Orage, era un método práctico que abordara la situación teniendo en cuenta el principal elemento existente en la realidad económica moderna: el dinero. Pues, sin eso, todas las ideas sociales sanas del distributismo y el gremialismo (o guildismo) no podrían llevarse a efecto o a la práctica de una manera realista. Providencialmente, es al final de esta segunda etapa en donde hace aparición C. H. Douglas con esa pieza que faltaba en el rompecabezas de la solución económico-social.

    En la tercera y última etapa "oragista" (1919-1922), todos los esfuerzos editoriales del semanario se concentran en la manifestación y propagación de las ideas y métodos de lo que el propio Orage denominó con el nombre de "Crédito Social". Es en el contexto de esta última etapa donde hemos encontrado las críticas que el colaborador habitual de la publicación, Hilaire Belloc, realizó a aspectos tanto parciales como generales del Crédito Social de Douglas (así como las correspondientes y congruas respuestas a las mismas).

    Sorprende realmente que una mente tan privilegiada como la de H. Belloc, a la hora de abordar el tema planteado por el Crédito Social, pareciera como si se le cortocircuitara el cerebro, demostrando una increíble incapacidad para una comprensión fundamental del mismo, o incurriendo en lamentables y extrañísimas contradicciones impropias de su enorme capacidad intelectual. Realmente es una pena que Belloc no se hubiera tomado el tiempo necesario (porque ciertamente hay que tomárselo para captar en esencia todos los entresijos del problema de la economía y, por tanto, su correspondiente solución) para estudiar todos los aspectos planteados por el Crédito Social, pues hubiese sido una aliado muy fuerte en la propagación del Crédito Social; y además (lo que a él mismo le hubiese interesado sobre todo) constituía el único método de implantación real conocido de las ideas del Distributismo en la economía moderna.

    La respuesta a la primera crítica de Belloc aparece firmada con las iniciales C. H. D. (es de suponer que se trata, claramente, de Clifford Hugh Douglas).

    Las respuestas a las otras dos críticas de Belloc aparecen sin firma, con lo que es de suponer que se trata de contestaciones editoriales, esto es, de autoría de A. R. Orage.



    Fuente de los textos originales:

    - The New Age (27 Octubre 1921).pdf

    - The New Age (9 Febrero 1922).pdf

    - The New Age (23 Febrero 1922).pdf

    Fuente de donde se han obtenido los textos: MODJOURN.ORG
    Última edición por Martin Ant; 05/01/2017 a las 14:39

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