Sé que mi opinión puede ser controvertida... pero la pena de muerte es para mí una aberración. Jamás se podrá saber por seguro en que medida un ministro del exterior puede ser responsable directo por genocidios y políticas de represión en el interior, aunque fuera en dado tiempo vicepresidente. Además, en los anos ochenta - los a que reporta la acusación - el Iraq estaba en guerra con el Irán chii y me parece que también no se podría en Iraq admitir partidos o organizaciones que apoyaban al enemigo...

Otra cosa: quien nos puede garantizar que en una dictadura un hombre puede quitar el gobierno cuando quiera, por diferencias de opinión?

Sé que nuestra santa religión no prohíbe terminantemente la pena de muerte; pero los cristianos deberíamos reconocer en nosotros que no sabemos lo suficiente para condenar a la muerte otro hombre (o mujer), por mucho que nos parezca que lo mereciese... pero esta gente que condena Tarek Aziz no es cristiana, claro.

Trabajos forzados, eso sí! No tiene el Iraq una tremenda falta de agua? Pues que abriesen los condenados canales de riega a pulso! Ná... matarlos es mucho más productivo, sin duda.