
Iniciado por
destinolumen
En el manifiesto advierto algún exceso retórico; quizá, incluso, un cierto grado de afectación y de reactividad -por lo demás, innecesaria- frente a la evidente manipulación actual.
Pero, en lo sustancial, el planteamiento es muy correcto.
En estos tiempos de general irreflexión, oportunismo y conclusiones fáciles, la historia - ese recinto complejo donde habita el Ser, la comprensión y el destino, de las naciones y colectividades - se maquilla, se adultera, se improvisa y se instrumenta tal como, en cada caso, convenga, usualmente ex perspectivas políticas, partidistas o sectarias que, ineludiblemente, generan el mayor cancer de la historia, cual es la post-historia; esa ideología de remota inspiración hegeliana que postula el comienzo de nuevos procesos sociales en determinado momento, al margen de sus precedentes, siendo incierta, tanto la novedad, como la data que se toma como novedosa referencia.
En este sentido, el supuesto padre actual de Andalucía no lo es porque con él no se inicia nada; y porque, en definitiva, es un personaje que no trasciende en absoluto para virtualizar o significar la historia de Andalucía.
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