Cita Iniciado por Ahari jokua Ver mensaje
Jaja, menudas risas. Por desgracia, no soy de caserío, pero ya me hubiera gustado. Sin embargo, tanto mi padre y mi madre lo son, y yo me he tirado largas temporadas tanto en un caserío como en el otro, además de el de mi tía en Zestoa.
De ahi viene mi afición a las peleas de carneros. Es una pena, ya que es una tradicion que está casi extinguida. Un lugar donde se mantiene la afición es la plaza de toros de Azpeitia, donde se hacen apuestas por valor de muchos €€€.
Por favor, no confundais las peleas de carneros con las peleas de perros que suelen organizar los gitanos o derivados. Las peleas de carneros son peleas por honor (aunque a los que desconozcais este juego os parezca increíble), y no son a muerte. Se sueltan los carneros (el que los suelte debe ser alguien que no sea su amo, ya que de lo contrario los carneros vuelven a él y no pelean) y se empiezan a dar de topes con la cabeza. Quien pierde es quien se acojona, se aparta y evita pelear más. Cuando pasa esto, al ganador se le deja "abusar" un poco, acojonando al perdedor, ya que asi se llena de orgullo y pelea con más ganas la proxima vez. El perdedor, sirve para poco mas que para semental en el caso de que sea un buen ejemplar, y si no su destino suele ser la cazuela, ya que rara vez suelen querer volver a pelear. Mi primo entrena los carneros en la cinta de correr (¡!) y les da jalea real para comer. Por desgracia, tambien existe el doping en este juego, como tambien existe en el arraste de piedra con bueyes (idi dema). Solo que a los bueyes si que les hacen controles jajajaja. Todo esto va en serio, que conste.
Por cierto Don Cosme, nosotros gitanos (ijitok) les solemos llamar a los de Orio, del mismo modo que los de Getaria son lapajales (comelapas) o los zumaiarras pulpos (olarruak).

Un saludo para todos
Aupa, mi aitona tenía una cuadra a su cargo, con caballos purasangre de carreras, y dejaba a los baserritarras de los alrededores meter allí a sus animales. Como había muchísimo espacio había un montón de animales, y entre ellos los carneros de pelea. Y recuerdo eso que dices, que el que perdía no valía para volver a pelear porque se le iba el ímpetu y la valentía.
También recuerdo que les daban muchas habas.
Jo, aquello era como el arca de Noé.
Pocas veces los he visto pelear, pero no se olvida, esas talkas resonando como piedras!!