Eres un romántico, el día que vengas a España no olvides ponerte las gafas de sol, pero de las de factor 3 ó 4 por lo menos, porque es para evitarte un susto. Por supuesto, hay mujeres como las que describes, pero si vieras que fauna ha crecido en las tres últimas décadas, creerías que estás en Sodoma y Gomorra, particularmente si es fin de semana y en cualquier discoteca. Ocurre lo mismo durante el verano, y da igual si es en una playa que por el centro de cualquier población que supere el estatus de aldea o pedanía. Y no te digo lo que te podría pasar cuando escuchases lo que les sale por la boca.

Hoy, esa mujer que describes parece una rara avis condenada a la extinción, porque lo que abunda son las machorras o las que compiten entre sí para ver cuál de ellas es más puta. Es una situación vergonzosa y triste, pero lamentablemente están en perfecta consonancia con esta sociedad.

Por supuesto, las mujeres decentes siguen siendo muchas, pero procuran pasar desapercibidas.