El creer que una supuesta "militancia" o "compromiso político" nos hace diferentes de unas pijas adolescentes es simplemente engañarse a uno mismo.
Y digo "supuesta" porque la militancia política tal y como se entendía en los viejos tiempos ha pasado a la historia, salvo en grupos extrmos de izquierdas o anarquistas.
¿Cuántos de vosotros habéis luchado alguna vez por defender vuestras ideas o vuestro país? ¡¡¡NINGUNO!!!
¿Cuántos de vosotros estáis dispuestos a "patearse" la calle para para "militar" de verdad en política? ¡¡¡NINGUNO!!!!
¿A qué habéis renunciado para defender vuestras convicciones políticas? ¡¡¡A NADA!!
Entonces, si os quitáis la careta ¿que queda? ¿qué os diferencia de esas dos pijas adolescentes del relato?
A mi no me engañáis...
Marcadores