producción historiográfica aún es un rasgo notorio pese a contar con centros universitarios de importancia.
Una mención especial dentro de ese panorama de las primeras décadas del siglo XX merece la obra del Dr. Rafael Schiaffino, especialmente por su clásica obra “Historia de la Medicina en el Uruguay” (1927), en cuyo primer tomo expone un estudio exhaustivo sobre la medicina de las misiones, revelando un dominio sólido de las fuentes de origen jesuítico a partir, en varios casos, de ediciones príncipes. De su interés por las misiones y la influencia cultural de las mismas es también testimonio su estudio “Guaranismos. Ensayo etimológico” publicado en el año 1956 (38).
Otra institución que se incorporó a partir de los últimos años de la tercera década del siglo XX a la tarea de sumar valiosa información histórica fue el Ejército, quien comenzó a editar fuentes sobre su historia institucional en la cual, desde su fundación, la presencia guaraní- misionera jugó un papel importante. La edición de documentación sobre el Ejército del Norte que se formó en 1828 y la edición de las listas de revista del mismo, más la publicación (a partir de 1932) de la “Correspondencia Militar” desde el año 1825 en adelante, constituyeron importantes aportes. La publicación del Boletín Histórico del Estado Mayor del Ejército, que se edita hasta el presente, registra en sus índices numerosos aportes documentales y trabajos de investigación con vinculación más o menos directa al tema misionero (39). En este contexto merece destacarse la edición de “Documentos relativos a la ejecución del Tratado de Límites de 1750” que realizó el Instituto Geográfico Militar, de consulta insoslayable para los que abordan dicha etapa de la historia misionera (40).
A mediados de la década de 1950 se nota un avance creciente en el campo de la heurística con ediciones documentales que van a suponer valiosos aportes, tal el caso de la recopilación de relatos de viajeros que realizó Horacio Arredondo a través de diversas publicaciones (41); las colecciones documentales que realizó el historiador Flavio García sobre la Campaña de Misiones que llevó a cabo el Gral. Rivera en 1828 (42); la publicación por Rogelio Brito Stífano de importantes fuentes para el estudio de la Banda Oriental en el eje del 1800 (43). Pero sin duda el aporte documental mayor estuvo dado por la edición del Archivo Artigas (44), que a partir de 1950 y hasta el presente lleva editados numerosos tomos donde como fruto de intensas pesquisas de investigadores realizadas en América y Europa se ha dado a conocer una masa enorme de documentos, especialmente del período revolucionario y en la cual queda de manifiesto el papel central que jugaron las antiguas Misiones y el pueblo guaraní-misionero durante ese decenio de liderazgo regional del Gral. José Artigas.
Precisamente a partir de la década de 1950, y en especial de la siguiente, se asiste a una verdadera explosión en la producción historiográfica uruguaya. La crisis económica y socio-