Lo que está ocurriendo con el caso Snowden, está dando a conocer cosas que muchos intuíamos y por las cuales se nos llamaba 'conspiranóicos' cuando nos arriesgábamos a hablar en público de ello. Es lógico lo muchísimo que al imperialismo yanqui (y sus aldateres) les molesta. Está saliendo muchísima mierda, y eso es bueno.
Creo que se está abriendo una pequeña vía de optimismo a la hora de querer ver finiquitado lo antes posible este asqueroso mundo unipolar surgido tras la caída del muro en 1989. En ese afán, cada vez más a mi juicio, la Rusia de Putin está convirtiéndose en una pequeña gran esperanza...
Un saludo
Marcadores