He leído la explicación que te dió ese "marxista-materialista", y no puedo estar más en desacuerdo con él. Si, como ya ha apuntado Kontrapoder, la homosexualidad cromosómica plantea algunas dudas (siempre existen hipótesis que se contraponen a otras, pasa hasta con las teorías consolidadas como paradigmas), con mucha más razón en relación con la tesis ateo-materialista de Richard Dawkins, que es de donde procede esa explicación.
Si alguno teneis ganas (y tragaderas) podeis dedicar unas horillas a leer El gen egoísta. Las bases biológicas de nuestra conducta, de este etólogo británico que empieza por odiar a Dios, y así lo manifiesta, y es que de hecho es uno de los grandes enemigos del Diseño Inteligente, o postura que mantiene un buen sector de físicos, cosmólogos y matemáticos, los cuales afirman que es im-po-si-ble la existencia del Universo y su explicación científica sin admitir la idea de la intervención de un Creador: Dios, para los científicos declaradamente creyentes, un Demiurgo, para aquéllos otros que no podemos considerar como hombres de fé.
Pues bien, Dawkins junto con Sagan y Stephen Hawkings, forman el trío calavera del ateísmo en la divulgación científica. Dawkins resulta particularmente pedante, empalagoso y repulsivo en su discurso. Él no entra en el campo cosmológico, sino que se limita al naturalista sobre la Tierra, con especial incidencia en el comportamiento humano y, en eso, es fiel seguidor de Wilson, un entomólogo (observador de hormigas) de la Universidad de Chicago que en los "60" formuló una teoría llamada: Teoría Sociobiológica: la nueva síntesis, en la que se plantea que todo el comportamiento social tiene base biológica, hasta el patriotismo, el racismo o la esclavitud, tienen dicho fundamento. Las reacciones no se hicieron esperar: la izquierda tachó de fascista al autor, la derecha de ateo materialista, el mundillo científico de la antropología socio-cultural y el de la sociología saltaron de sus asientos, convirtiéndose en sus más arrécimos enemigos...etc., etc.
Por supuesto, todo este entramado se relacionó pronto con los precedentes materialistas del evolucionismo darwinista y lamarckiano, así como con el neo-evolucionismo. Para que os hagais una composición extraigo a continuación un par de párrafos de Richard Dawkins y así os podais hacer una idea del discurso de este pájaro de cuenta:
"Para una máquina de supervivencia, otra máquina de supervivencia (que no sea su propio hijo u otro pariente cercano) constituye una parte de su entorno, al igual que una roca, un río o un bocado de alimento. Es algo que obstruye el camino que puede ser utilizado. Difiere de una roca o un río en un aspecto importante: tiene tendencia a devolver el golpe. Ello se debe a que también es una máquina que guarda sus genes inmortales en administración para el futuro, y al igual que la primera máquina de supervivencia no se detendrá ante nada para preservarlos..."
(Op. cit., Cáp. V. "Agresión: la estabilidad y la máquina egoísta")
A efectos de aclarar este concepto del "glorioso autor", máquina de supervivencia, él mismo nos dice unas cuantas páginas antes de la misma obra lo siguiente:
"Nosotros somos máquinas de supervivencia, pero "nosotros" no implica solamente a las personas. Abarca a todos los animales, plantas, bacterias y virus." (Op. Cit., Cáp. III: "Las espirales inmortales")
En mi opinión es más que suficiente para entender lo que te "contó" el "maestro propagandista del ateísmo" acerca del "comportamiento homosexual". Con semejante explicación, no sólo queda "todo aclarado" (para él y los que son como él, claro), sino "también justificada" cualquier conducta en tal sentido rechazando de paso, los prejuicios negativos. Si todos tenemos en los genes la respuesta homosexual, todos somos suceptibles de tal comportamiento, en tal caso, ¿cómo vamos a juzgarlos de un modo tan absurdamente cruel e intolerante? La conclusión es que deberemos admitirlos, no importando cuál sea nuestro grado de compromiso moral ni nuestra escala de valores, eso no tiene valor intrínseco pues todo es relativo.
En definitiva, no es sino sofística en estado químicamente pura y rechazable de modo totalmente absoluto. Atenta contra la más íntima esencia del ser humano: su espiritualidad y el hecho cierto de la Creación divina. Por eso, y parafraseando uno de tantos eslóganes al uso: "Frente a la homosexualidad: tolerancia cero". No obstante, mantengo lo dicho sobre aquéllas personas que tienen este problema de nacimiento, mientras no surja una teoría cierta en sentido contrario, o surja algún tipo de tratamiento que corrija tal situación.
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